Oh Bendito Secuestrador

11. Una dulce despedida

Ya pasó un mes después de mi cumpleaños. Todo a pasado tan rápido que ya ni se que pensar ni decir, Solo se que algo me dice que con quien debo estar es con Christian, espero que ese algo no esté equivocado.

A sólo una noche de conocernos me vine a vivir con el, y dos noches después follamos.

Cómo dicen «La vida es una y hay que vivirla» ¿Y que mejor manera que esa?.

Todavía sigo sorprendida como han pasado tantas cosas en tan poco tiempo.

-Buenos días Sweetie, -Le digo dulcemente, -Buenos días princesa, -entra una llamada a su celular y Christian sale a tomarla.

Suena exaltado a la voz del teléfono -Esperame ahí, no te muevas, - dice al teléfono y  cuelga. – ¿Sucede algo? – Si, es Gabriel algo le pasa y me necesita, llegaré tarde, no me esperes despierta.  –Está bien, ¿Sabes que te amo verdad?- le digo, con dulce voz. – Y yo aún más. -le doy un beso rápido y se va corriendo.

No puedo creer que puedas amar tanto a una persona con tan poco tiempo de conocerla, esa conexión tan grande a pesar de la manera en la que empezamos, pero creo que todo sucede por una razón.

El día está lluvioso, perfecto para una tarde tranquila acompañada de Netflix y palomitas.

Aunque me preocupa un poco que Christian esté conduciendo con estas lluvias tan fuertes, cada segundo aumentan más ni siquiera se puede ver por las ventanas.

—

Son las 11 de la noche y Christian aún no llega, suficiente Netflix por hoy, me voy a dar un baño y luego a dormir, el dijo que no lo esperara despierto.

—
Tocan el timbre tantas veces que me despierto, son las 1 de la mañana quien puede ser a esta hora, Christian tiene llave así que se que no es el.

La policía.... Mi mente está paralizada.

–Buenas noches señorita, ¿Es usted familia del Joven Christian Wilson? – Claro el es mi novio, ¿Está todo bien verdad? – Necesitamos que nos acompañe señorita – ¿Está todo bien verdad?- lo digo con con voz fuerte.

–El joven Christian sufrió un accidente automovilístico y se encuentra en estado crítico, está en el hospital vinimos para llevarla hasta allá. - La voz de la policía suena lejana en mi cabeza, estoy en shock y no he procesado nada, solo no puedo parar de llorar.

Me voy hacia el hospital con la pijama puesta, aún asimilando todo.

—

Cuando llego al hospital, el está ahí tan vulnerable e inconsciente, está siendo atendido por los doctores está muy herido y no soporto verlo así, duele hasta lo más profundo de mi corazón.

Corro hacia donde el pero una enfermera me detiene, y yo gritando desesperadamente – Christian, Christian estoy aquí. – Señorita el está siendo atendido tiene que esperar afuera - responde la enfermera.

No puedo estar tranquila mientras el está ahí debatiendo entre la vida y la muerte.

Todo pasó tan rápido, no hemos tenido suficiente tiempo, el no puede abandonarme.

Nuestra historia comenzó de la manera más loca que puede existir y después de yo dudar tanto de mis sentimientos, ya no me cabe ninguna duda de que lo amo con cada parte de mi ser.

Así que el no puedo abandonarme, necesitamos más tiempo para amarnos el uno al otro.

– Señorita, Señorita - suena la voz de la enfermera a lo lejos – Señorita, ¿Se encuentra bien?

– Si, ¿Donde está Christian?, necesito verlo – Lo lamento hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance  pero lamentablemente el no sobrevivió.

– No, No, No, Christian está bien yo sé que el está bien, No, No..

– Señorita Paula, siéntese un momento, necesita asimilarlo.

– No me diga que me calme - digo gritando - Usted viene toda tranquila a decirme que él murió, que el amor de mi vida murió y usted me dice que me calme?

– Usted está mintiendo, necesito verlo.

– Venga por aquí señorita Paula.

No puedo creerlo, Christian ¿Porque me abandonaste? ¿Por que? ¿ Por que? ¿ Por que?.

Me siento a su lado y le agarro la mano.

Tan rápido te conocí y tan rápido te fuiste, tan rápido llegaste a mi vida y tan rápido te ame.

Un día me secuestraste y me pediste que me mudara contigo, yo acepté, me dijiste que me iba a enamorar de ti como tú lo estabas de mi y así fue Christian mírame aquí amándote hasta el último segundo.

¿Porque me dejaste tan rápido?

¿Y nuestro futuro juntos?

No sabes lo destrozada que estoy al saber que ya no despertarás a mi lado cada mañana, que no me dirás buenos días princesa.

Pero quiero que sepas que disfruté cada minuto que pasamos juntos, que nunca te voy a olvidar y que siempre serás el amor de mi vida.

Te amo niño fresa o mejor dicho te amo bendito secuestrador.

Y como todos sabemos el amor es muy bonito pero siempre hay algo que lo interrumpe.