Pintando Un Cielo

UNA NOCHE ENAMORADA.

Bitácora de un escritor.

Día 1889.

He de asomarme a aquella ventana
con vino en mano y vista de halcón,
aunque no me encontraba bajo custodia
mi cabeza; era mi mayor prisión.
Pero...
Ahí estabas vos.
Con un viejo lienzo y óleos con tonos sombríos.
Tomabas aire para empezar la función.

Fui afortunado,
aquella noche tu lienzo se mancho de óleo color amor.
Se lloraron lágrimas óleo color púrpura,
nacieron remolinos y montañas
del color blanco de tu voz.
El pueblo que parecía imaginario
fue contruido por tus delicadas manos,
y se pintó.

Tus recuerdos te contaron un chiste
y sonreíste, sonreíste al ritmo de Beethoven,
al mismo ritmo de sus sonatas,
al ritmo de once pinceladas,
al ritmo de tu corazón.
Y así el cielo nocturno, óleo color azul... se estrelló.

El indecente viento levanto tu vestido,
y en vuestro lienzo se levantó aquella forma sinuosa,
color verde, negro y marrón.

Tu locura volvió etérea la pintura
el óleo se revolcó con Van Gogh,
el cielo escondió tu talento
las estrellas robaron miradas,
y la noche... se enamoró.

P.D: Vos, mi luna,
tan brillante, tan menguante, tan arte.
Nadie se le ocurrió mirarte
nadie quiso nombrarte
nadie te pinto completa,
nadie más que yo... intento amarte.