15. JUNGKOOK

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[The Archer, Taylor Swift]

Diario de Jeon Jungkook

Park Jimin: altura 1,74 metros. Peso: aproximadamente 61 kilogramos. Tiene el pelo tintado de rosa y largo, le gusta trenzarlo. Es un año mayor que yo y estudia Teatro. Es pequeño, me llega a la barbilla, tengo que agacharme para besarlo. Eso me gusta.

Sucesos relevantes

Uno. Me golpeó con un libro en la cabeza, casi me provoca una contusión cerebral. Por si acaso fui a médico, no me mató, pero pudo hacerlo.

Dos. Me deja estar a su lado y hablar sin parar. No se molesta o me pide que me calle... me deja ser yo mismo.

Tres. Alguien llamado Hoseok fue de la mano con Jimin. No es algo que me involucre, pero sigue siendo relevante :)

Cuatro. Fuimos a una cita, aunque tal vez él no sabía que era una cita, debí decirle como dijo Dami. Por eso la próxima vez que lo invite, esta vez él sí sabrá que estamos en una cita.

Cinco. Fue mi primer beso. Se sintió raro... es a lo que llamó sentirse especial

Características importantes

Todo en Jimin es descuidado; su cabello, su ropa, sus palabras. Jimin actúa como si nada importara.

Tiene un hermano, se llama Jihyun. No habla mucho de él, pero cuando lo hace parece culpable. Solo hay culpa, culpa y más culpa.

Su color favorito es el negro, un color peculiar. El negro existe sin ninguna luz, está presente en la elegancia, en la nobleza y puede evocar desconsuelo.

Su risa está contenida, y aunque parece que sonríe no es verdad, tiene una sonrisa muerta.

Tiene muchas cosas dentro de él, pero no se preocupa en dejarlas ver. Vive por los demás y a veces hace daño sin que se dé cuenta.

❃•❃•❃

Estaba nublado, en la ciudad no solía haber mañanas sin sol, pero aquel día las nubes grises cubrían el paisaje con una inminente lluvia rara a principios de abril.

Jungkook comió lentamente su desayuno que consistía en un sándwich de mermelada y mantequilla de maní. Porque ese día era viernes.

Cuando terminó siguió su rutina; tomando su diario lo metió en una mochila junto con sus audífonos reductores de ruido, un lápiz y un paquete de Oreos, luego se puso su abrigo negro, se peinó su cabello castaño y pasó un momento viéndose al espejo.

No se veía de la mejor manera, tenía grandes ojeras en su rostro y la piel cenicienta. No había dormido nada y su cerebro paso casi toda la noche creando escenarios fatales. Suspiró tenso antes de salir de su departamento sin olvidar tomar el pequeño crisantemo que estaba en el florero de la entrada, acarició los pétalos con suavidad.

Representaba a la verdad y al amor frágil.

Caminó lentamente por las calles, sin ser consciente de su alrededor. Después de un tiempo se sentó en una banca, se puso sus audífonos, tomó su diario junto al lápiz y comenzó a escribir, a veces también dibujaba cuando tenía ánimo suficiente. Pero en esa ocasión no pudo hallar palabras, tampoco pudo dibujar y solo pudo dedicarse a hacer rayas, que para quien las vieran no tendrían sentido, ni significarían nada. Aun así, para Jungkook significaba colisión.

Cuando las hojas no fueron suficientes, guardó el diario.

Cuando Dami le dio su primer diario, Jungkook no sabía que anotar entre las páginas, le tomó un tiempo conocer sus gustos y entender quién era. Ahora tenía una colección de diarios en una caja en su armario, no podía imaginar entender a una persona sin ellos, se hicieron importantes.

Florecer | KOOKMIN |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora