XIII

2.1K 221 269
                                    

-|Capítulo 13|-
°·_Sopresa_·°

-¡Akaza!

Una fuerte voz pronunciaba su nombre con desesperación y él se negaba a hacer caso. Seguía arrodillado dentro de la casa sintiendo el fuego arder alrededor suyo poco a poco mientras lágrimas de rabia se deslizaban por sus mejillas.

-¡Levántate demonio de rayas, te necesito!

Al escuchar eso alzó su vista rápidamente y dirigió su mirada a todos lados logrando ver a Kyojuro cerca de allí con un Senjuro sano y salvo en sus brazos.

-¡Están bien! -Gritó alegre y se dirigió a ellos tan rápido cómo pudo. -Kyojuro ¿Tú te acuerdas de-?

-Demonio ten. -Interrumpe entregándole el cuerpo inconsciente de su hermano y Akaza lo recibe con cuidado. -Cuídalo bien por favor... -Pide con una sonrisa y enseguida varios pedazos de hielo se incrustan en su espalda haciendo que apenas pueda mantenerse en pie. -Usé todas mis fuerzas para salvarlo ¡Por favor vete ya! -Rogó desesperado y al instante Akaza retrocedió unos cuantos pasos para dar un gran salto y salir de allí, no sin antes mirarlo una vez más y notar cómo varios demonios se dirigían al lugar. Estaba seguro, lo atraparían. Ese rayo que había podido presenciar antes de que la casa se derrumbara en realidad había sido Kyojuro, él pudo llegar más rápido usando su poder y logró salvar a Senjuro, pero lamentablemente sus fuerzas se habían agotado totalmente con ello.

Sin volver a distraerse empezó a correr más rápido y en pocos minutos ya se encontraba en medio del bosque.

-¿A-akaza...?

-Sen... -Pronunció el demonio mientras lo veía y mostraba una emoción pura. -¡Estás bien!

-¿D-dónde estamos? -Preguntó el menor apenas mientras trataba de abrir sus ojos. -Kyojuro... Escuché su voz... Otra vez soñé con él.

Akaza sintió una gran opresión en su pecho al escuchar eso y no respondió nada, sólo pudo escuchar la fuerte explosión que hubo a los segundos seguido del biwa de Nakime, ya estaba, habían logrado su objetivo, Kyojuro había sido llevado a la fortaleza, pero dentro de sí sabía que alguien todavía estaba allí.

-Sen... -Habló una vez más y se detuvo para arrodillarse y atraer el cuerpo en sus brazos. -Por favor, si en algún momento nos separamos prométeme algo.

-¿Q-qué dices?

-No confíes en nadie, absolutamente en nadie, mantente alejado de todos y no escuches sus palabras porque serán mentiras, todos los demonios son unos mentirosos, así que quedate en- -Y justo antes de poder seguir sintió su cuerpo apretarse con total fuerza que tuvo que soltar a Senjuro para que no le haga daño. -P-prometelo. -Soltó apenas mientras de su boca empezaba a salir sangre.

-¡Akaza! ¿¡Estás bien?! -Gritó desesperado al ver cómo se encontraba.

-¡Prometelo!

-B-bien... Te lo prometo. -No entendía que es lo que pasaba y sólo hizo caso al ver lo desesperado que estaba el peli rosa. -¡Pero dime que te pa-!

-Ya veo. -Y sin que se dieran cuenta el rey demonio apareció detrás de Senjuro y tapo su boca con una mano atrayendolo hacia él fuertemente. -Otra vez un Rengoku.

-Muzan-Sama por favor no le haga da-

-¡Silencio! - Gritó haciendo que Akaza empezara a botar más sangre de su cuerpo y lo obligó a callarse. -¡Yo decido que hacer con quien quiero! -Agregó incrustando sus uñas en una de las mejillas del menor haciendo que éste empezara a soltar quejidos de dolor.

Akaza podía verlo, podía ver cuán asustado se encontraba al estar así, Senjuro estaba pidiendo que lo ayudara pero no podía hacer nada al tener su cuerpo controlado, era sólo un títere, y con todo lo que sentía fue soltando lágrimas inconscientes al saber que Senjuro pronto se convertiría en un demonio y se olvidaría de él.

Sentimientos Indeseados [ AkaSen ] Where stories live. Discover now