Cómo la amaba a ella. La hacía sentir completa, cada beso, cada prenda que le quitaba la volvía loca.
Fue depositando besos hasta curarle cada cicatriz.
Cada beso mostraba todo el amor absoluto que le tenía,
le enseñaba a que algunos sí pueden ser amantes.
La piel con piel no se sentía incómodo, era natural, caricias en los espacios más íntimos eran simples y románticos, cada vez se sentía tan real como normal.
La realidad: Los dos,
humano y humano,
cuerpo y alma, eso eran.
Se complementaban. Sencillo.
Él era el cuerpo, y ella el alma.
Uno le faltaba el otro,
y cuando se encontraron,
fuegos artificiales cayeron y se estrellaron en el cielo.
Etéreos. Perfectamente imperfectos.
Son simples mortales y defectuosos que no se hacía ni medio de cada uno,
pero juntos...vaya.
No existen amores perfectos,
pero sí creo que existen momentos de amor perfecto, sencillo, apasionado y lleno.
El amor sí está allí afuera, sólo tenemos demasiado miedo de dejarnos amar.
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Cartas a la memoria...
PoetryEsto es un conjunto de cartas, escritos, que he hecho al pasar de los años. Son personales, tal vez muy personales diría yo, pero quiero que alguien los lea, sino, me volveré loca. Simple. Si me conoces, está bien, todos tenemos cosas raras dentr...
