𝙔𝙖 𝙥𝙖𝙨𝙖𝙨𝙩𝙚 𝙡𝙤𝙨 20. (terminada)

Vino

Fue por Derian y lo cargó, comenzó a meserlo en sus brazos mientras repetía que debía calmarse, él niño sólo respiraba agitado y pronto se calmó, no era mami pero se sentía igual de confortable.

Levi- ¿Qué maldita manera de llorar fue esa?, ¿qué es lo que te pasa?

Con cuidado intentó darle el biberon y todo iba mejor hasta que percibió un olor muy fuerte, el pañal del niño empezó a calentarse y le dieron ganas de lanzarlo por los aires, respiró hondo y fue por él otro.

Levi- no me digan que la telepatía de gemelos también funciona para ensuciar el pañal, no me jodan

Está vez Dey fue el problema, se retorcía porque apesar de que no le gustaba estar sucio odiaba más que lo toqueteran tanto y quitarle esa ropita implicaba eso porque no era cosa fácil, las manos de Levi quedaron hechas un desastre, se quería morir del asco tan grande que sintió.

Derian logró agarrar el talco y lo sacudió haciendo un desastre con este, Levi empezó a discutir con los gemelos y su cara llena de talco les hizo tanta gracia que se empezaron a reír.

Levi- ¡voy meterlos en jaulas!

No sabían que demonios decía ese tipo con la cara blanca, pero definitivamente era muy gracioso.

En otro lado

Él mesero dejó las copas en medio de la mesa, ya habían ordenado después de unos minutos de conversación y las cosas iban muy bien, justo después de servir el vino y dar los primeros sorbos las cosas se fueron al hoyo.

Floch- ahm, ¿dije algo malo?

Eren se tambaleó en su asiento y comenzó a retorcer sus labios, Floch le había dicho que tenía una figura muy inesperada no lo dijo de mala forma, para nada, se lo estaba comiendo con la mirada pero no sabía ese problema que tenía él castaño, Eren sentía que todo lo que se decían sobre su cuerpo era una crítica, incluso si era algo bueno lo tomaba como sarcasmo o lástima.

Tomó las servilletas y mientras se le cortaba la voz luchaba por no llorar, no sabía que responder sólo decía balbuceos extraños, confundía y asustaba al pelirrojo que empezaba a sentir vergüenza por no saber que había dicho mal.

Eren- lo siento, no entiendo, ¿a qué te refieres?, yo- sé, yo sé que- sé que tengo estas fallas pero no es que quiera es que-

Floch- ¿fallas?, ¿pero de dónde?, no quise ofenderte, estoy nervioso me estoy aguantando las ganas de decirte lo mucho que me atraes, eres una obra de arte

Eren levantó la mirada en seco, sus lágrimas cesaron y confundido ladeo la cabeza, ¿obra de arte?, no sabía cómo reaccionar, ¿había alguien que se sentía atraído por él con su nuevo físico?, esto no parecía ser una broma, ni tampoco se parecía al ambiente amable de los policías. Despistado por sus problemas de autoestima no notaba como en la comisaría y en otros sitios los hombres querían incarle el diente.

Floch- maldición, soy un estúpido, no sé cómo verme normal delante de ti, y siempre me miras así (suspira) si no quieres seguir con la cena lo entenderé

Eren- no, no, está bien, yo quiero seguir aquí contigo, y voy a confesarte que te invité porqué acepto ser tu mano derecha en el trabajo

Rápidamente sacudió esas malas vibras y comenzaron desde cero, tragos iban tragos venían, pidieron cada uno un plato diferente pero muy cargado y las anécdotas familiares no pararon.

Eran muy compatibles en el ámbito laboral pero personalmente no tenían nada en común, toda la conversación se basó en hablar sobre trabajo y formas de mejorar la empresa, en eso se entendían muy bien.

Eren tenía la mente en las nubes con tantas copas de vino, Floch intentó detener su consumo de esta bebida pero fue imposible ya tenía una borrachera muy pronunciada.

Floch- Eren creo que debería llevarte a tú casa

Eren- aveces me pongo a pensar, ¿Isabel se sentirá bien cuando Farlan debe sacarlo antes de venirse?, él hacía eso conmigo porque si lo dejaba dentro no podía recuperar la ereccion

Floch- (sonrojado) Eren tranquilo, estás hablando de más

Eren- no pasa nada somos amigos, yo tenía que tocarme solo los últimos meses de nuestro matrimonio puesto que no quería tocarme, compré un vibrador y se enojó mucho

Floch estaba avergonzado no quería saber eso pero Eren no dejaba de hablar, él mesero se acercó para recoger los platos y terminó escuchando que él exs esposo estaba molesto porque el vibrador era mucho mejor que él en la cama, todo se volvió raro e incómodo.

Estás cosas tan privadas estaban saliendo a la luz por el simple hecho de que Eren nunca hablaba de ello, su problema con las bebidas alcohólicas es que sacaban sus pesares del alma sin ningún filtro, estaba sexualmente afectado desde hacía tanto tiempo, y aunque la mayoría del tiempo estaba triste también se ponía caliente, y no se atrevía a hacerse nada porque no quería verse así, se rechazaba íntimamente así mismo como lo hacía Farlan.

Con mucho cuidado lo llevó hasta su auto y pagó para que cuidaran el de Eren hasta que lo pudiera recoger, en el auto él castaño comenzó a comportarse muy volátil, con la luz de la noche no podía distinguir bien el rostro de su acompañante y pensó que era Farlan, comenzó a insultarlo, e intentó pegarle.

Floch fue paciente, lo acomodó entre sus brazos y lo abrazó hasta que lo malo pasó, Eren levantó la cabeza y al saber quien era comenzó a besarlo, su lengua estaba desesperada por tener tanto tiempo sin sentir otra de esa manera. El beso no llegó a más porque Floch lo detuvo, no se atrevía a tocar a Eren en ese estado, no era lo correcto.

Eren- ¿quieres hacer el amor?

Floch- Eren no podemos, tal vez un día después de concretarnos bien las cosas se den pero trata de poner tus pensamientos en su lugar, no es momento

Eren- por favor Floch, dijiste que te gusta mi cuerpo

Floch- intenta dormir, eso te ayudará

Eren- no lo ocultes, sé que te doy asco, Farlan tenía razón ningún hombre quiere acostarse con tanta grasa

Se abrazó las piernas y ni lágrimas le salían, lo único que podía sentir era un vacío profundo, ellos no debieron incluir alcohol.

Horas después

Exhausto Levi observó la habitación limpia, había tardado más de media hora limpiando el talco, una hora intentando dormir a los bebés, y 20 minutos en prepararse algo de comer, no podía más con el cansancio y cayó rendido en el sofá.

Tocaron la puerta y quejándose se levantó, con los pasos cansados llegó y miró por el agujero, su jefe y Eren se veían terribles, esta cita no parecía haber mejorado sus ánimos.

Floch- estuvimos en el hospital, Eren vómito hasta el cansancio

Levi- gracias por traerlo, yo me encargo

Después de una breve despedida Levi cargó al castaño hasta su habitación, le puso la sábana encima y se acostó a su lado, Eren al sentir que estaba acompañado en la cama se recostó sobre aquel pecho, una pequeña lagrima cayó de sus ojos acompañada de una sonrisa, Levi le daba paz.

Eren- nunca volveré a tener citas

Levi- ¿tan mal te fue?

Eren- le doy asco

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