Flowers

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El pelinegro mira la flor que acaba de robar con cierta preocupación, Chuuya le había contado su situación desde hace varios días y la única cosa que le pidió fue que Dazai no se enterara.

Dazai es su mentor e incluso una figura paterna, pero Chuuya es lo más cercano a lo que debería ser una figura paterna que ha tenido desde que entro a las calles.

Quiere ayudarlo, quiere hacer sentir a Chuuya orgulloso, entonces no dirá nada a Dazai y sin importar que encontrará al sujeto que es culpable de esto.

Guarda la flor en su abrigo y marca su camino hacia Black Lizard para ver que tal van las investigaciones.

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Chuuya por fin termina de barrer todas las flores, se deja caer cansado en su sofá, mira el techo intentando pensar en como solucionar todo este asunto sin que Dazai se entere de su vergonzoso secreto.

Dado que Dazai lo vio actuando extraño es básicamente imposible que no venga a preguntarle, entonces simplemente debe inventar una excusa.

Puede decir que pasa de forma espontánea, en el peor de los casos solo debería enviar un par de mensajes para que el resto de la mafia lo apoye en su historia.

Aunque aún no sabe como ocultar el sonrojo y el brillo en sus ojos, Dazai lo descubrirá si lo mira por unos segundos, se siente como una presa fácil en este momento.

Confía en que Dazai no será tan imbécil como para ser malo con él, en caso de enterarse, tal vez se burle de él por unas semanas, pero no ser realmente mezquino, ahora es un tipo bueno.

Siente los pétalos acariciar sus mejillas, se pregunta si las flores pueden ser de distintos colores, hasta ahora únicamente ha visto tonalidades amarillas.

Escucha la puerta de su apartamento abrirse, no le importa demasiado, no podrían matarlo de todas maneras.

—Chuuya-san— Dice Akutagawa.

El pelirrojo le hace una seña de que lo está escuchando muy cómodo como para levantarse.

—Dazai-san llegará en unos 10 minutos— Le advierte mientras se hinca para ver cara cara el rostro de Chuuya.

—Asumí que vendría hoy, no te preocupes— Chuuya estira su mano y le revuelve el pelo —Pero gracias—

—Chuuya-san ¿Realmente está bien?—

—Si, no me duele nada, solo es molesto todo esto de las flores—

Akutagawa lo mira, como si no estuviera seguro de creerle.

—Si cambia algo en su estado, llámeme inmediatamente— Le pide.

Chuuya asiente y Akutagawa ahora está más tranquilo

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Como se dijo, Dazai llego unos 10 minutos después, no toco la puerta, nunca lo hace.

Ve a Chuuya recostado en el sofá mientras lee un libro, Akutagawa ya se fue para ese momento.

—Chuuya— Saluda casualmente.

Ante la presencia de Dazai más flores aparecen por su cuerpo, siente la cara y orejas calentarse por la vergüenza, dios, debe ser un desastre ahora mismo.

Cuando Chuuya encuentre al responsable de esto lo matara de forma cruel y horrible por toda la vergüenza.

—Desperdicio de oxígeno—

El castaño mira a Chuuya, hay tantas flores y pétalos que el pelirrojo parece un bonito campo floral en el apogeo de la primavera.

Se inclina sobre Chuuya y sus dedos tocan delicadamente la mejilla de su excompañero y las flores desaparecen al activar indigno de ser humano.

Chuuya, por la cotidianidad, no se siente nervioso por el toque de los dedos de Dazai en su rostro, Dazai siempre es extrañamente íntimo cuando desactiva su habilidad.

—Te dejo solo un tiempo ¿Y te descuidas de esta manera en las misiones?— Pregunta Dazai burlonamente, todo para ocultar que en realidad está preocupado.

—¿Qué mierda quieres?—

Dazai suelta el rostro de Chuuya, no pasan ni un par de minutos hasta que la primera flor regresa al cabello de Chuuya.

El calor vuelve a subir a su rostro.

Dazai ve las flores regresar entre aterrado y sorprendido ¿No puede desactivarla?

—Chuuya ¿Sabes quien fue el usuario de habilidad?—

—Si lo supiera ya lo habría atrapado— Responde, desvía la mirada avergonzado.

—¿Te duele?—

—No—

—¿Hay alguna molestia por las flores?—

—No, solo que quitarlas es cansado— Dice —Se generan de forma espontánea, es molesto—

—¿No has notado algún patrón de aparición?—

—No— Chuuya mira a Dazai nuevamente —La mafia se encarga de esto, así que no te metas—

—Llámame si comienza a dolerte la aparición de las flores, incluso si no es permanente, al menos podría ayudar un poco ¿Bien?—

—Como si fuera a hacerlo— Se queja, pero esta vez aparece una flor diferente a las malezas amarillas de siempre, una única Dalia malva.

Las Dalias, en específico la malva, están relacionadas con la gratitud, regalar estas flores es como decir "Gracias por estar siempre a mi lado"

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Kouyou retira cuidadosamente las flores del cabello de Chuuya, mira la Dalia en uno de los costados del cabello de Chuuya, la toma con cuidado y se la entrega al pelirrojo.

—Apareció una nueva— Le dice.

Chuuya mira con cierta curiosidad, desde que la habilidad hizo efecto solo había flores amarillas, no eran de un tipo específico, pero parecían de esas flores que crecen de forma silvestre en el césped.

—¿De qué tipo es?— pregunta mientras siente las manos de Kouyou desenredar los pétalos nuevamente.

—Una dalia— La ejecutiva suspira preocupada —La habilidad está cambiando—

—No se preocupe Ane-san— Chuuya la voltea a ver —Sigue sin doler, tal vez es diferente porque hablé con Dazai cara a cara—

—Aun así, te llevaré con Mori— Kouyou quita una pequeña flor en la comisura del labio de Chuuya —No es debatible, si quieres negarte deberás vencerme en un duelo con espadas—

—Yo solo digo, tal vez la flor cambia respecto a lo que Dazai hace, después fe todo él es el detonante—

—Tal vez si, tal vez no— Kouyou mira la dalia en las manos de Chuuya —Pero no perdemos nada con que te revisen—

—Ane-san sabe como me siento con los exámenes médicos—

Está bien con que los doctores lo revisen, está bien con las agujas, pero las máquinas como las de resonancia y el olor a hospital siempre le generaron escalofríos, sabe que no es lo mismo, pero le recuerda un poco a su pasado.

—Lo sé, solo una revisión rápida ¿Si?—

—Dejémoslo pasar y si vuelve a cambiar me hago exámenes otra vez —

—Bien— terminan acordando.