Capítulo 58

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Ariel fue solo e inmediatamente buscó a Matías.

Ariel esperaba que fuera natural que estuviera bailando con otra persona después de venir al baile, pero Ariel lo vio quieto en el mismo lugar en el que se separó de ella.

Ella había convertido involuntariamente a Matías en un alhelí.

- Sir Matías.

- Ariel.

Sólo pensaba salir a tomar el aire un rato, pero hablar con el chico rubio le llevó bastante más tiempo del que esperaba.

Sin embargo, Matías no la culpó por llegar tarde.

- Pensé que estarías bailando.

- No quería hacerlo.

Matías, que respondió brevemente, añadió.

- Por cierto, tu diseñador te ha enviado un mensaje pidiéndote que vengas. Es casi la mitad del baile así que ve.

- Helen... ya veo. Bien, ahora vuelvo.

'Me olvidé de eso. ¡El hecho de que tengo que cambiar mi vestido!'

Ariel saludó a Diana, que la miraba de lejos, y luego abandonó su asiento.

- Uhm... Gran Duque.

Varias señoras se acercaron a Matías después de que Ariel se fuera. Era un grupo diferente al de las damas que se le acercaron hace un rato.

La dama más espléndidamente vestida entre ellos le hablaba con el rubor empolvando sus mejillas.

- Sé que es de mala educación que una mujer pida a un hombre que baile primero, pero... ¿bailarías conmigo?

Matías chasqueó la lengua internamente.

Ya había rechazado a algunos de ellos con frialdad después de que Ariel saliera antes a la terraza. Pero parece que aún quedan algunos valientes.

Con o sin Ariel, nunca bailaría con ellos.

'Por supuesto, tampoco habría venido aquí sin ella'.

Respondió Matías sin ocultar su enfado.

- Me niego. Encuentra a otro.

La dama a la que avergonzó por su dura negativa se retiró con la cara roja.

Desde entonces, Matías ha expulsado a los humanos a su alrededor con su aura afilada, presionando con fuerza su aburrimiento.

- Ah, mi orgullo está herido. Qué pena.

Las damas que fueron rechazadas por Matías a pesar de que Ariel no estaba presente se sintieron humilladas y no supieron qué hacer.

Estaban enamorados de la sede vacante de la Gran Duquesa y de la aparición de Matías, sin pensar en reflexionar sobre la actitud irrespetuosa que habían cometido.

La mayoría de ellas eran mujeres de buena familia y que destacada belleza, que confiaban en no ser rechazadas por los hombres.

Así que, por primera vez en su vida, se sintieron muy disgustadas con su autoestima.

Además, no se dieron cuenta de lo temible que es el Gran Duque porque los rumores sobre Matías de hace 13 años ya pasaron por sus oídos por su ignorancia.

- No podemos quedarnos así.

Renunciando a acercarse directamente a Matías, cambiaron de objetivo al unísono.

Alguien joven y fácil. Ariella La Cartel.

Han sacado a relucir la historia de Ariel en presencia de jóvenes que aún son menores de edad.

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