AGAPIOS [1.2]

12: ANTOJOS DEL DEMONIO

AGAPIOS

- Esto, esto es antojo del demonio -digo viendo todo en la cama

- Cállate -dice

Son las tres de la mañana y Amy me mando a la cocina, para traer donas, galletas, ensalada de frutas, ensalada francesa, yogurt de manzana y sin contar que me ha pedido frambuesas.

- Solo cállate -dice comiendo galletas con donas.

No me doy cuenta pero se queda dormida con todo a su alrededor y solo le tomo una foto para el recuerdo. Aunque no sea la primera, cuando se quedó dormida le tome una.

***

AMY

Miro a Agapios trabajar, mientras como una nutella con galletas, me llega un mensaje que he estado esperando y acepto feliz.

- ¿estas bien? -dice y asiento- venga, deja de comer eso.

Asiento y lo ayudo con unos papeles, me mira y me guiña el ojo.

- sabes... que hace semanas envié un curriculum -me corta

- ¿aqui? -dice- ¿por?

- no, osea en una empresa... que era mi sueño trabajar allí, aunque también aqui, pero mis esperanzas eran nulas -digo

- ¿porque? -se limita a decir

- Son los números uno en la industria -digo- Solo aceptaban a personas profesionales y no tenia ninguna referencia y en aquella empresa....

- ¿ A que quieres llegar? -dice- no entiendo.

- A que me aceptaron -digo- Iré allí.

- ¿Te vas? -dice

- Solo por ocho horas -digo- Nada más.- se queda en silencio por varios minutos

- Sigamos mejor -dice- Por supuesto que me estás contando, porque rechazaste la oferta ¿verdad? y me estas haciendo una broma.

- De hecho la acabo de aceptar, mañana comienzo -digo y su mano se vuelve puño

- de que mierdas estás hablando -dice

- Que desde mañana yo renuncio aquí, para trabajar en Alfundi's -digo feliz

Me mira furioso y vuelve a lo suyo, pero ya no hay conversación, solo trabaja.

¿No debí contarle verdad?

***

¿mañana? mañana es viernes, por ende hay capítulos locos.

Quiero aclarar que esta historia no será larga, será aproximadamente por veinte capítulo, (no se sabe) 

La que si será larga es la historia SOLO UN ACUERDO la cual les dejará sin estado emocional, verán que les dije.

Aquí estuvo Ale