Cada Día

Él lleva largos cinco meses encerrado en su casa, "...vive solo..." y eso nunca fue un problema, él estaba cómodo con su espacio "...sin embargo, desea en algún momento unirse a alguien...", anhela "...un brazo cualquiera en el que poder apoyarse..."

Cada día "...aparece ante el alféizar de la ventana como un hombre cansado, abriendo y cerrando los ojos entre el público y el cielo..."

Antes disfrutaba mirar por su ventana, ese "...rectángulo de luz amarilla, situado en una altura, entre el prodigio de las chimeneas bizcas y las nubes que van pasando por encima de la ciudad, barridas como un viento de maleficio.", pero ese disfrute se desvaneció, ahora sólo hay silencio, "...silencio que sube desde la calle, hace más lentas, más profundas " las noches. Solo se oye el caer de las "...gotas de lluvia sobre la chapa del alféizar de la ventana..."

A veces se le viene a la mente un recuerdo, son los "...borrachos simpáticos, de cuyos bolsillos escapan golletes de botellas..." que veía cada viernes salir del bar de enfrente, los va a extrañar, debido a todo, el bar quedó en bancarrota luego de dos meses.

"...pasaba las noches y los días casi sin dormir. A veces pensaba que la próxima vez que se abriese la puerta..." todo sería normal, no más enfermos, ni miedo, ni soledad.