ONE SHOTS ( YEONGYU)

Being a single parent is hard.

-Oye, nena, te tengo. Todo va a estar bien —murmuró mientras ella se ponía más inquieta. La apretó contra su pecho mientras buscaba desesperadamente en la bolsa de pañales por tercera vez, tirando todo al suelo en su búsqueda. -Mierda, no lo veo. ¿Dónde dejó papá tu chupete? Retrocedió a través de la biblioteca, a través de todos los estantes que pensó que había examinado antes, y llegó con las manos vacías. Mientras tanto, bebé kim se había movido hacia pequeños llantos con hipo que siempre procedían a lamentos a menos que la pacificaran.

Está bien, tendremos que esperar afuera hasta que el abuelo venga a buscarnos. Había tomado el autobús a la biblioteca porque el viaje siempre hacía dormir a su hija. El plan había sido saciar su adicción a la lectura hasta que su padre saliera del trabajo y pudiera recogerlos para la cena. Había sido un muy buen plan, un plan que había funcionado muchas veces antes, pero por la forma en que la cara de su pequeña se arrugó, se dio cuenta de que si no salía ahora, toda la biblioteca sería testigo del Gran Derretimiento. de la tarde del domingo.

Beomgyu terminó afuera en los escalones de la biblioteca, con una bolsa de pañales inútil a su lado y un bebé llorando en sus brazos. Su padre no llegaría hasta dentro de treinta minutos, si tenía suerte, su hija lloraría hasta quedarse dormida exhausta antes de eso. Desafortunadamente, ella era una Kim y, aunque siempre habían sido una mierda en el campo de juego, tenían una resistencia increíble cuando se trataba de hablar o, en este caso, gritar. Así que probablemente estaba jodido y no de la manera divertida. Sí.

-Oh, cariño, papá lo sabe. Lo siento mucho. Encontraremos tu chupon cuando lleguemos a casa. Shhhh, está bien, shhh.

-¿Beomgyu?-

Mierda, conocía esa voz. Beomgyu se giró para encontrar a Choi Yeonjun con su uniforme de ayudante de pie detrás de él. Oh Dios. Ahora bien, Yeonjun no estaba caliente, estaba mucho más allá de lo caliente que lo caliente se sentía frío a su alrededor. lo caliente se congeló junto a Choi Yeonjun. Estaba construido como un luchador con el rostro de un dios y Beomgyu no era inmune a su pura perfección. Incluso un hombre heterosexual tendría dudas cuando se enfrentara al espécimen que era Choi, pero Beomgyu no era totalmente heterosexual, por lo que estaba condenado desde el principio. El uniforme solo lo empeoró, porque el uniforme estaba ajustado en todos los lugares correctos. Tragó saliva y levantó a Bebé Kim un poco más alto contra su pecho, su llanto continuó sin cesar.

-Oficial Choi-, dijo casualmente mientras levantaba la vista de donde estaba sentado.- ¿Qué te trae a la biblioteca en un día tan hermoso? ¿No es necesario que le des boletos a algunos velocistas o algo así?

-En realidad, recibimos una llamada-, Yeonjun se aclaró la garganta y Beomgyu se sorprendió al ver que sus mejillas se habían teñido de rosa. ¡¿Se estaba sonrojando?! -Recibimos una llamada sobre una queja por ruido.

Beomgyu lo miró fijamente por un minuto, miró a su hija y luego a Yeonjun, con la boca abierta por la sorpresa y luego por la furia.

-¿Recibiste una queja por ruido porque mi hija estaba llorando?-Su voz estaba mezclada con una rabia apenas controlada. ¿Quién llamó a la policía por el llanto de un bebé? ¿¡En serio!? Los bebés lloran, es lo suyo, y solo porque un bebé está llorando no significa que llame a la policía porque los bebés que lloran son normales. -¡A la mierda eso!- Beomgyu se puso de pie y se colgó la bolsa de pañales al hombro. -Bien, oficial, me iré ya que ofendí a la ciudad al dejar llorar a mi hija. ¿O querías arrestarme por perturbar la paz? -Al diablo con eso, al diablo con quien hizo la llamada, y al diablo con el oficial Choi por responder a ella.

Beomgyu se alejó, o al menos lo intentó, pero la mano muy grande y muy fuerte de Yeonjun estaba sobre su hombro.

—¡Beomgyu, espera! No estoy aquí para ahuyentarte. Estamos obligados a investigar cada llamada, tenía que venir. Por favor, solo háblame.