Around The World - Parte 2

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—Aquel que los engendró hace miles de años está encerrado en un especie de roca al que llaman la Piedra Eterna. Por ahora, ellos tienen una de las tres llaves que puede liberarlo.

—¿Una? —intervino Alecto—. ¿Qué tipo de llaves son?

—Más que llaves son estrellas plateadas.

—Estrellas plateadas... —susurró George, teniendo un recuerdo fugaz de cuando era niño.

—¿Y dónde están esas estrellas y esa piedra infinita? —preguntó Alecto más desesperado.

El sonido de unas botas sobre la madera los interrumpió. El barco del hombre de la gabardina ancló al lado de ellos y varios hombres vestidos similarmente invadieron la embarcación de George y Alecto. Siendo liderados por...

—Gregory Pendleton... ¡los agentes de Londres! —exclamó el hombre del ojo de vidrio.

—En efecto, soy aquel que posee el nombre que mencionas —dio la señal con sus dedos y sus hombres tomaron a George y a Alecto para apresarlos y arrodillarlos mientras los apuntaban con sus revólveres.

Alecto buscó una salida y se levantó de golpe, chocando con la mandíbula de uno de los agentes. Sin embargo, otros dos agentes lo neutralizaron golpeando su nuca y dejándolo inconsciente.

—¡Alecto!

El sonido metálico de un arma sonó cerca de su sien. Sintió el frio metal en su cabeza y permaneció estático.

—No creas que no los hemos estado siguiendo desde anoche. Su cercanía con la Máscara fue muy sospechosa así que supuse que iban a encontrarse con alguien más como ese abominable hombre —dijo Gregory—. He permanecido despierto toda la noche por saber sus identidades. Joestar y Bunbury. Hijos de familias ricas y de abolengo, envueltos con gente de baja calaña. ¡Qué despreciables!

George tenía la respiración agitada. Aquella situación lo estaba superando y no encontraba alguna solución. El movimiento de la mano de Gregory alrededor del arma, preparándola para disparar hizo que George agache la cabeza, esperando el final.

—¿Cuáles son tus últimas palabras antes de morir, George Joestar?

—Hice lo correcto —respondió sin resentimiento.

Gregory frunció la boca por el enojo y movió sus dedos para jalar el gatillo, pero uno de los agentes le dio aviso sobre un ruido extraño.

—¡Sonó como un trueno! Seguramente se acerca una tormenta.

—Espera... ¿quién está silband...?

Un proyectil cayó en el estribor del barco, explotando aquella parte de la embarcación y mandando por los aires a varios agentes. Alecto chocó con el asta y George recibió varios pedazos de madera en los brazos.

El hombre del ojo de vidrio estaba arrastrándose, dejando una estela roja ya que sus piernas habían sido cercenadas por la explosión.

—P-Por favor, ayúdame. ¡N-No dejes que me atrape, por favor! —suplicó el hombre a George.

Estaba por acercarse cuando un hombre vestido con pantalones y chaqueta de cuero con un sombrero amarillo se paró frente a él, pero mirando al hombre de ojo de vidrio.

—Struck... Thunder Struck —terminó con una carcajada débil, conociendo su destino.

Thunder agitó los brazos rápidamente, lanzando un puñal que atravesó la cabeza del hombre de ojo de vidrio. Cuando se aseguró que estaba muerto, sacó el puñal y lo lanzó al río.

George pudo notar que llevaba una enorme escopeta colgada en la espalda. No dijo nada, simplemente dejó que se vaya, pero antes de irse, Thunder volteó para verlo de reojo. Luego de eso, se tiró al agua y se sumergió para no ser visto.

JoJo's Bizarre Adventure: Around The WorldWhere stories live. Discover now