Te juro que NO es amor

Capitulo 1

Capitulo 1

Aquí vamos de nuevo… un día más en la universidad. Estoy en la mitad de mi segundo año de la universidad, estudiando arte dramático y como clase extra tengo ballet. Todos en la universidad me conocen, me miran algunos de lejos y las valientes se atreven a saludarme.
—hola Joon—me sonríe una chica, le sonreí y seguí caminando. Los populares son mis amigos y los maestros me aman. Todos me aman, mi vida es tan perfecta. Y mis amigos son los mejores. Continúo caminando por los pasillos y entre las personas hasta llegar a mi salón. Dejo mi mochila en mi lugar y decido salir al pasillo, me recargo en la barda observando el paisaje. La universidad es enorme y llena de áreas verdes.
—¡papá pero estás loco!—escucho que gritan, sonrío al darme cuenta de quién se trata, viene hablando por teléfono—no es eso papá, amo a mi hijo pero… ¿en verdad crees que puedo cuidarlo sola?—parece que Hyo Jin está muy metida en su conversación, me da mucha risa cuando habla por teléfono, es como si tuviera a la persona frente a ella, se acerca y me saluda dándome un pequeño golpe en el brazo que ha decir verdad me dolió—lo sé—parece discutir con su padre.—papá—grita, se sienta en el piso recargándose en la barda, la observo—yo lo sé, lo sé. Mi hijo suele ser… un niño… ¿activo? Papá es un niño, deja que se divierta, ¿a quién le afecta? ¿A caso no prefieres que sea travieso a que este detrás de una computadora todo el día o pegado al televisor?—se altera, levanto una ceja mirándola—sabes que papá mejor hablamos después, tengo clases, aparte no creo que sea una buena idea, déjalo terminar ahí… ok, ok… cuídate, te quiero. Bye. —cuelga y guarda su celular, voltea a verme.
—¿problemas con tu hijo?—suspira y asiente. La primera vez que la escuche diciendo “mi hijo” en verdad creí que si tenía un hijo pero después me conto que así le dice a su hermano que es tres años menor que ella y que es el pequeño de la familia. En pocas palabras… es un desmadre.—¿Qué paso?—me siento a su lado.
—quieren que mi hijo venga a vivir conmigo.
—¿y no quieres?
—me gusta cuando viene de vacaciones pero vivir con él no sé si pueda. Cheol Yong es divertido y puede estar tranquilo pero no por mucho tiempo. Pasar el tiempo con él como hermana es divertido pero como su madre es estresante. Te juro que no se concentra en nada. Es un desastre. ¿Te he contado todo lo que hacía?—algunas cosas me las ha dicho pero… me da risa como cuenta las cosas.
—no—sonreí.
—una vez incendio un sembradío
—¿de verdad?—Bang Hyo Jin viene del campo, su familia es muy rica y tiene 8 o 9 montañas de su propiedad. Se dedican a vender manzanas y no sé qué más. Ella está muy orgullosa de su familia y decidió venir a la ciudad a cumplir su sueño de ser actriz, ya hasta pensó en su nombre artístico, a veces le gusta que la llamemos Go Eun Ah.
—al muy lindo de mi hijo se le ocurrió hacer una fogata con sus amigos y comer papas dulces, pero que crees, el muy inteligente de mi hijo y sus amigos no hicieron bien la fogata y toda la siembra se quemo, los bomberos llegaron y tardaron horas en apagar el fuego. Mi padre casi lo asesina. Lo castigo pegándole con una rama, así siempre lo castigaban, si le dolía pero se le pasaba rápido.
—¿y qué hizo después?
—ayudo a mi papá y sus trabajadores a preparar la tierra para sembrar de nuevo—sonreí, pobre chico. Hyo Jin empieza a reírse muy fuerte, la miro y sigue riéndose como loca.
—¿Qué te pasa?
—una vez—se priva de la risa—él muy tonto fue castigado por nada—sigue riéndose, la mire con curiosidad.
—¿por qué?
—ya te había contado que mi familia tiene muchas hectáreas ¿cierto?—asentí—pues resulta que mi hijo quería portarse mal y junto con sus amigos robaron unas manzanas, se las comieron y todo. La gente los descubrió y de nuevo lo golpearon con la rama, para que al final resultara que ellos habían agarrado manzanas de nuestra propiedad.—nos reímos los dos.—¿te imaginas que va a suceder si se viene a vivir conmigo?
—¿y ahora en que problema se metió?
—se peleo con unos chicos. Al parecer se está metiendo en varios problemas últimamente—hace un puchero. El profesor acaba de entrar al salón—vamos—golpea mi pierna, se levanta y entra al salón, yo detrás de ella. Me siento a su lado, la miro por un momento, suspire y mire hacia el pizarrón. Ella me cuenta mucho de su hermano, en cierto punto me da curiosidad de si de verdad es un desastre o solo exageran.