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A la mañana siguiente me desperté por los fuertes rayos de sol que atravesaban a través de la ventana de la habitación, yo odiaba esos malditos rayos de sol.

Me levanté y fui directo a tomar un baño, hoy era fin de semana, por lo que podría estar todo el día con mi papá, bueno, si el no tenía nada que hacer ese día, claro está.

Cuando estaba en medio baño escuché a mi padre tocar la puerta del baño, yo solo mire a través de la cortina de baño, respondiendo a sus golpecitos en la puerta.

- ¿Qué pasa papá? -

- Ya está el desayuno Michael, baja en cuanto te vistas -

- Si papá -

Cuando salí de bañarme y empeze a cambiarme me puse a pensar en unas cosas, ¿Qué pasaria si mi mamá se entera?, ¿Le hará algo a papá?, ¿O me hará algo a mi?.

Termine de cambiarme y baje al primer piso ví a mi padre sentando en el sofá escribiendo unas cosas, que la verdad, me daban mucha curiosidad.

- Buenos días papá, ya estoy aquí -

- Está bien Mike, vamos a desayunar -

Después de desayunar mi padre y yo fuimos al supermercado a comprar la despensa, me gustaba ir con el a hacer las compras.

Llegamos y agarramos un carrito entrando al local, mi papá llevaba el carrito y yo la lista de productos a comprar, ahí, en ese local, ví a mis amigos, estaba a punto de hablarles pero recordé las palabras de mi padre, así que solo suspire, esperando a que no se dieran cuenta de que yo estaba ahí.

Habíamos regresado con las compras a la casa, habíamos comprado unas cosas más aparte de las de la lista

A medio día me encontraba en mi habitación, escribiendo unas cosas en mi diario, hasta que ví a mi padre entrar por la puerta, supuse que era algo importante, así que cerré mi diario.

- Michael, mañana vienen tus hermanos y tu madre - Dijo mirandome

- ¿En serio? - Dije algo sorprendido, ya que ellos acostumbraban venir todos los 20 de cualquier mes, pero mañana era 16

- Michael, ¿Podrías hacer como si nada hubiera pasado entre nosotros solo por el día de mañana?

- Si padre -

Después de esta corta conversación mi padre me dió un beso en la cabeza y se fue a su habitación, supuse que para hacer cosas importantes.

Yo seguí en lo mío hasta que se hizo de noche, solo suspiré y cerré mi diario, dejándolo en un cajón del armario de mi habitación.

Baje al primer piso de la casa, directamente a la cocina, me serví un vaso de leche, la verdad, tenía muchas cosas que pensar, frustrado, le di un trago al vaso y lo puse en la mesa.

Mire por la ventana y me puse a pensar, ¿En qué momento mi familia se empezó a romper?, aunque, viéndolo por otro lado, si mis padres no se hubieran divorciado, no podría haber confesado mi amor a mi pareja.

Si, se que suena un poco egoísta de mi parte, pero, es la verdad, lastima que eso costo la ruptura de mi familia.

Estaba tan sumergido en mis pensamientos que no me di cuenta que mi padre había llegado hasta que sentí sus manos, al parecer, mi padre me había abrazado por atrás.

- Michael, ¿Qué tanto piensas? -

- Uh, nada, es que, solo pensaba en mamá y en mis hermanos, realmente extraño a Evan y a Liz -

- Y dime, ¿Extrañas a tu mamá? -

- No, realmente no, no como en la forma que me trataba -

En ese momento mi padre me dió la vuelta y me abrazo, yo solo correspondi al abrazo posando mi cabeza en su pecho, era, tan cálido, tan dulce, tan, lindo, tan cómodo

• - Todo por ti - William x Michael •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora