III

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El decidir que ser estaba a la mano de ambos jóvenes, ser ofrendas o demonios, a nadie debería importarle lo que sean mientras sus pecados no vayan mas haya de los limites, vivir era decidir si ser, humanos o maldiciones.

Desde aquella conversación, los gemelos resguardaron con recelo hasta evitando que sus padres dejaran ver su propia naturaleza, preocupados por la muerte que los asechaba, sus padres temerosos de las ideas de sus hijos tocaron aquel tema tabú para los críos, quienes rápidamente lo evitaban diciendo que no era necesario de hablar, Amira aquella hermosa y educada hija escuchaba a sus padres en silencio, mordiendo sus labios con enojo, escuchar a sus amados padres explicarle que no deberían pensar que eran y que no eran, que jamás deberían ocultarse en su hogar, aquellas palabras enojaban a la joven, si no estaba maldita, si no estaban malditos ¿Por que debían ocultarse y tener miedo?

Zora, quien rebelde y elegante no dejaba avanzar aquel tema, molesto ante la misma idea de su hermana sobre ellos mismos, todo el desarrollo de ambos jóvenes, llenas de enseñanzas de sabiduría y filosofía, tanto conocimiento y la idea de un mundo por conocer, siendo retenida ante la idea de parecerse a un ser maldito, la libertad que tanto le enseñaron desde niños ahora se alejaba mas haya de esa época

Ambos hermanos ante el rechazo abrupto que sabrían tendrían por la sociedad decidieron hacerse un juramento, una promesa de corazón que ninguno debía romper el cual fue "Demonios o humano, debemos vivir y ser libres" aquel deseo que sonaba a un sueño fuera de lugar, hermanos tan jóvenes sin embargo llenos de madures cuales amaban a su familia y odiaban a el mundo por querer negarles la vida por ser diferentes, odio a lo desconocido que les aterraba como una historia que les conto su padre cuando estaban fuera de casa

_Hubo personas que no eran de este lugar, cual piel era morena, color que ha su creencia fue ofrecida por el sol, ojos ámbar cuales brillaban de hermosa cultura y revoltosos cabellos rojizos, elegantes y curiosas vestimentas cortas y holgadas, aquellas personas que pertenecían a una raza llamada brokeros, sin embargo ellos se llamaban a si mismos gitanos, quienes cada lugar que cruzaban llenaba de belleza con sus bailes culturales y risas encantadoras, quienes usaban espadas y armas no para matar, si no para su hermosa danza, la cual la llenaba de gracia y elegancia.

_¿Conociste a alguno padre? -pregunto el hijo intrigado ante la raza cultural y libre-

_Llegue a conocer lo ultimo que quedaba de ellos...Hijos míos no odien al humano por ser temeroso.

_ ¿Qué paso con los gitanos? -pregunto la hija, al entender por donde iba aquella conversación notando la seriedad de el que es su hermano-

_Aquella hermosa raza llego a este continente, feliz y alegres como aventureros, mostrando su elegante y hermosa cultura, esperando ser bien recibidos -el padre silencio sus palabras ante el sentimiento agrio- las personas se obsesionaron con la belleza de su gente, y sus danzas, creyendo que tenían derecho sobre aquella hermosa raza.

_¿Y que sucedió? -preguntaron ambos hermanos quienes soltaron sus bolsas y observaron a su padre-

_Los gitanos reaccionaron protegiéndose y utilizando por primera vez las armas que tanto amaban para bailar, ahora siendo itilizadas para defenderse y escapar, se dice que hubo un señor feudal que se enamoro de una hermosa gitana, le ofrecio riquezas, fortuna y honor, esta se negó, ya amaba a alguien con quien era feliz y quería viajar a su lado, el señor feudal ante el doloroso rechazo de esta juro su desgracia, asesinando al que era su amante, esparciendo miedo y odio por todos sus territorios ante esa raza, asiendo que les temirán y cada que los vieran desearan tomar sus cabezas y tomar aquellos cabellos rojizos que al ellos danzar parecía fuego, creían que les darían suerte.

_ ¿Qué paso con la gitana que rechazo al viejo ese? -pregunto Zora indignado ante la idea de saber que le cortaron las alas a aquella mujer-

_Ese despiadado hombre la hizo bailar para el hasta la muerte, haciendo que esta odiara su mas amada pasión, haciendo sangrar sus pies de tanto bailar, aquella hermosa gitana harta de aquello sin saber si su familia estaba viva, ya que ni su amado lo estaba, al no saber donde estaba el resto de su gente, dio su ultimo deseo a sus dioses, vio por ultima vez el cielo al que tanto su raza amaba bailarle en el atardecer y tomo aquella hermosa espada que era lo ultimo que le quedaba, fue con el señor feudal y toda su gente, donde estaba la esposa del señor feudal que tanto la codiciaba y donde estaba el resto de el pueblo de ese hombre.

_¿Los mato no es así? -pregunto aquella hermosa joven sin pestañear sintiendo que la agonía de aquella mujer le había arrebatado todo-

_Dio su ultima y mas hermosa danza, dedicándosela a su gente y desde que había sido atrapada dio su ultima sonrisa, acercándose a quien era el señor feudal empuñando su espada apuñalo su pecho arrebatándole su katana y con lagrimas en sus ojos y una sonrisa rota, asesino a todos los que estaban en aquella sala, viendo y sintiendo la que fue la venganza ante su gente, se sintió sin ganas de vivir, deseaba ser libre y salió de aquel lugar extendiendo la mano al cielo apuñalando su vientre, deseando ser libre, desando volver a ser una drokero, deseando volver a estar con su gente, anhelando volver a renacer como una de ellos.

_Esto no tiene final feliz ¿no?

_La familia de aquella Drokero la busco en aquel lugar al escuchar que una de los suyos se revelo, aquellos pensando que podrían matar a otro de los suyos decidió ir y si era necesario matarse entre ellos para salvar a los suyos, y lo que encontraron fue una masacre la cual parecía artística, la posición de los cuerpos indicando aquella danza única con esa se les caracterizaba había sido utilizada para asesinar a aquellas personas.

_¿Que sucedió?

_Encontraron a la chica, lastimosamente ya había fallecido, buscaron en todo aquel lugar buscando si habían mas drokeros y lo que encontraron fue un pequeño, hijo de aquella hermosa dama y del que antes fue su amante asesinado, quien aun era un cachorro.

_Padre, ¿Cuál es el final de la historia? Fue una mal final, ¿Por que nos lo cuentas? -dijo el hijo queriendo negarse a pensar que su futuro y el de su hermana fuera parecido-

_¿Y quien dice que tuvo un mal final? -dijo el padre quien observaba al vacío, al cielo de la tarde-

_La gitana murió, su amante igual y su hijo quedo solo...¿Por que eso seria un buen final padre? -pregunto ahora la hija quien dejo toda su poca paciencia-

_Aquella hermosa mujer, recupero su cielo y pudo volar...

Ambos hermanos cerraron sus labios ante la idea indescriptible a las palabras de su padre y por primera vez ambos hermanos no pensaron igual, Zora quien escuchar el hablar de la libertad como ante la idea de revelarse al mundo y decidir cual era su camino, y Amira quien vio el cielo pensando internamente sobre que era volar, sintiendo que la muerte de aquella mujer fue su mas grande libertad, quizá y para ellos podría ser igual, morir y poder volar.

El padre los vio deseando que sus palabras llegaran al corazón de sus hijos y entendieran lo que el les deseaba trasmitir, aquel deseo que ambos jóvenes debían elegir y en un futuro seguir.

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Espero les guste :D

La Melodía Del AlmaWhere stories live. Discover now