Capitulo 2

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La verdad no es un gran día, haré lo de siempre, desayunar, vestirme y salir.
Salgo de la habitación y no hay nadie en casa, mi madre y mi padre se fueron a trabajar, mi hermano al estar dos cursos menos que yo y recién empezar bachiller, se tenía que ir pronto.
Cuando terminó de desayunar, me visto y bajó las escaleras, sin esperarme que en el portal se encontrarán, Duman, Ailen y Eda.
-Heyy chica misteriosa- me dice Duman llamando mi atención.
Porque me dice chica misteriosa? si, realmente el que ayer me leyó la mente fue él, no entiendo nada.
-Hola Duman- digo algo apagada.
Realmente hoy me levanté desganada sin ganas de nada, mi mente jugaba conmigo, me decía que no merecía algo así, que lo único que tenía que hacer en la vida era estar sola.
Nos encaminamos los 4 hacía el insti que os diría sí, simplemente pensar que hoy sería el último día y mañana no volvería a clase era mi única salvación.
Al llegar a la entrada los 4 nos aproximamos hasta los otros dos que faltaban en este grupito.
-Holaaa chicoss - dice el chico rubio.
-Heyyy- décimos los cuatro a la vez.
De la nada alzó la mirada y veo a Farid, que me mira al mismo tiempo. Porque ese chico se centrará tanto en mi, si tiene a mil mujeres detras de él.
-Vaya ese chico si que tiene interés en tí.
Sorprendida por lo que me habían dicho, miró hacía el lado donde se encontraba la persona que lo había dicho y me encuentro con la mirada de Duman, esos ojos oscuros que no mostraban brillo alguno, solo pedían a gritos ayuda. Me sonríe de manera pícara causando en mi cierto color en mis mejillas.
-Realmente nunca entenderé, porque tiene tanto interés en mí, si no soy gran cosa.
-Y si no es tu físico? Y si lo que le gusta de ti es tu forma de ser?
-Puede ser, aunque no lo entiendo Duman, lo poco que lo conozco es desde primero de la eso y mírame ahora estamos en selectividad y sigue prestando la misma atención.
Después de decirle todo esto decido apartarme de él, derrepente noto un pequeño dolor en el pecho que va bajando a mi tripa.
Avanzó como puedo hasta esconderme detrás de un pivote para que nadie se diera cuenta de mi sufrimiento.
Ya había cesado el dolor, pero había alguien que si se había dado cuenta de que estaba pasando algo al notar mi ausencia.
-Eira, te pasa algo?
Sus ojos brillaban más que nunca de una manera bastante especial, siempre era así de radiante conmigo. Cuanto menos decía algo, ella más se acercaba, hasta conseguir darme un gran abrazo.
No soy de contacto físico, porque nunca he recibido de eso y menos por parte de mis padres. Pero a ella le dejaba que me abrazará, porque necesitaba algo así después del dolor y que mi mente me jugará malas pasadas.
Cuando se separa, me coge la mano, me mira a los ojos y su sonrisa deslumbraba más.
-Nose que te estará pasando ni se porque estas así, pero estaré aquí para lo que sea enserio. Quiero ser tu mejor amiga en este camino tan duro que te está poniendo la vida.
-Eda...- porque lo hacía? Que necesidad tenía de ayudarme con todo este tormento- sabes que no hace falta y que no necesitó ayuda.
-Lo se Eira, pero siento la necesidad de darte todo mi apoyo y no verte sufrir.
-Esta bn...
No se que tenía esa chica que conseguía en mi una afirmación en todo lo que me proponía.
En la lejanía observé a Cleo que coqueteaba con Duman, bueno en si intentaba coquetear con él, notaba como me molestaba que esa araña venenosa se le acercará a él.
Nos acercamos a donde ellos, me mirá como si de una persona asquerosa se tratara y como siempre me trata con despreció.
-Que, pringada, que miras?
-Pues nada, porque realmente mirarte sería como mirar a una babosa, da asco.
Se me acerca, pero no coqueta como otras veces, si no desafiante con ganas de sacarme de quicio. Pero no, esta vez no lo iba a conseguir.
Me encaró a ella, la miró con la misma mirada desafiante que ella muestra.
Después de un rato en el que nos dejamos de mirar, coge y se va con sus dos compinches. Se me acercan todos y empiezan a preguntarme:
-Espera como te has podido encarar así a la reina del insti??
-Buaaa, como lo has echo Eira?
Detrás de todos, me observaba Duman que sabía perfectamente porque lo había echo, porque me había encarado de esa manera a Cleo.
Cuando dejan de preguntarme y presionarme, me coge del brazo y me aparta de todos.
- Se porque lo has hecho.- me dice confiado, con esos ojos oscuros.
-Porque crees que lo he hecho?- le digo mirándole a los ojos, para que vea que podía mantenerle la mirada y que no me intimidaba.
-Porque habías visto, que estaba intentando tontear conmigo y te has puesto celosa- dice con una pequeña sonrisa pícara y manteniéndome la mirada.
Pero que se cree este ser? Que yo me he colado por el o que estaba celosa. Bueno lo último no lo negaré del todo, pero no le diré nada.
-No me hagas reír porfavor, lo había hecho para que no caigas en las redes de esa araña venenosa, así que no supongas algo que no es.- digo mientras me alejo de él y me acerco a nuestro grupo.
La verdad es que ése chico tiene algo que me engancha y no se que es, supongo que será sus ojos o lo que me quiere decir con ellos.
Miro de reojo a donde él se encontraba y le pilló mirándome fijamente, si, quien realmente estaba colado por mi era él.
Derrepente chocó contra alguien, dejo de mirar a donde se encontraba Duman y miró con quien me había chocado, es el chico rubio que todavía no se ni su nombre.
-Hola Eira, me he dado cuenta de que hay algo entre tu y Duman.
-Hola no se como te llamas...-que le digo? Que si, que ese chico tiene algo que me causa curiosidad y que me atrae a él- no digas chorradas.- como siempre y no había otra cosa en la vida de Eira. Si, en mi vida es que no podía dejar de hacerme la dura.
Se ríe un poco y me vuelve a mirar, este chico no tenía la misma mirada que Duman, era algo más alegre un brillo parecido al de Eda.
-Lo siento no me presenté, me llamó Atif.
-Hermoso nombre de donde es?
-Es origen árabe.
-Pues es muy bonito la verdad.
Cuando le digo eso, empiezo a notar pinchazos en la tripa pinchazos muy fuertes, que hacían que me encogiera de dolor. Atif me carga en sus brazos y me lleva hasta dirección.
En breves minutos aparece la ambulancia y llegamos al hospital, todo esto yo consciente y con dolores enormes.
En un costado veo a mis padres que hablan con el médico y al poco tiempo veo entrar a mi grupo de amigos corriendo, preocupados por lo que me podía pasar y es que ni yo sabía que me pasaba, solo escuchaba voces en mi cabeza que me decían que no era suficiente, que no merecía la pena.
El dolor aumentaba, las lagrimas no cesaban y poco a poco sentía como me caía al suelo, quedándome completamente dormida.

Marhym✨

Mi desorden mentalWhere stories live. Discover now