Única Parte

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Después leer aquel mensaje lleno de cariño de Horacio, Volkov quedó completamente en blanco, hizo su mayor esfuerzo para darle unas palabras de ánimo a su compañero con la esperanza de que tuviera la felicidad que siempre mereció.
Después de mandar aquel largo mensaje se quedó mirando su celular algunos minutos, esperando que hubiera una respuesta, al menos una señal de que Horacio había leído su mensaje pero nada paso... Aquellas dos palomas se quedaron en blanco asegurando que el mensaje había llegado pero aún no era leído y posiblemente no lo sería jamás, Volkov soltó un sonoro suspiro guardando su celular en el bolsillo antes de mirar a su alrededor, todo estaba en silencio... Y aún cuando siempre le gustó el silencio ahora no se sentía en calma como otras veces, para él era demasiado extraño y confuso que la falta de ruido le hiciera sentir incómodo, hace tiempo se había acostumbrado demasiado al ruido a su alrededor sin siquiera notarlo, ahora estar solo con su mente era... Incómodo y molesto y una pregunta llegó a su mente rápidamente "Y ahora que sigue?" no quería seguir sintiéndose así, tomo la decisión de buscar a sus compañeros del FBI, camino por el lugar encontrándose con algunos agentes que solo seguían su vida con normalidad, Volkov saludaba a todos con la típica seriedad que le caracterizaba, intento encontrar a los agentes con los que siempre compartía buenos momentos pero ninguno parecía estar presente, decidió ir a buscar a Blake al lugar donde siempre tomaba café pero esta vez no se encontraba desobedeciendo a Horacio con sus problemas con la cafeína, Volkov finalmente pensó que tal vez los encontraría patrullando, debían estar ocupados así que se adentro en su patrulla y comenzó a conducir, de nuevo el silencio se hacía presente... El peligris comenzó a rascar su nuca y algunas veces sus mejillas intentando no pensar en el silencio que había finalmente se decidió por poner algo de música en la radio esperando que eso ayudará a distraer su mente pero parecía que toda la ciudad había decidido estar demasiado en calma y callada, no hubo mucho trabajo ese día, algunas cosas demasiado simples que lograban distraerlo un poco de todo lo que pasó con Horacio, por suerte al regresar a la comisaría finalmente encontró a los cuatro agentes que buscaba, estacionó el auto y camino hasta la entrada donde ellos hablaban

-Privet, eh... Que hacen aquí? Los estuve buscando todo el día- Dijo el ruso mirando a los agentes los cuales interrumpieron su conversación

-Buenas V lo siento, estabamos ocupados hace poco llegamos aquí- Dijo Blake tomando la mano de su novio

-Bueno, no se han perdido de mucho, hoy no ha habido muchos problemas- dijo el ruso con tranquilidad mientras se cruzaba de brazos -Y... Que hacían? Conversaban de algo?... O... Solo se encontraron aquí?- El peligris intento crear una nueva charla con los agentes evitando un nuevo silencio

-De hecho vinimos a despedirnos, jota y yo... Nos vamos a ir, queríamos buscar a H y asegurarnos de que estuviera bien, ya sabes para llamarlos si necesita algo- Dijo Blake con una sonrisa intentando calmar el ambiente, sus amigos estaban tristes eso era obvio y Volkov al escuchar esa noticia se mostró sorprendido

-V-vaya... Pues... Me alegro por ustedes, espero... Que encuentren pronto a H y... Si saben cómo está... Pueden llamarnos- dijo el mayor de todos intentando sonar tranquilo ante la noticia

-Claro, si sabemos algo de H los llamaremos, pero bueno... Supongo que ya es hora de irnos o no cielo?- hablo jota con tranquilidad mirando a su novio el cual asintió y se acercó a sus amigos para darles un último abrazo, las lágrimas de sus amigos no tardaron en aparecer aunque sabían que podrían mantener el contacto era difícil despedirse despedirse de un gran amigo, finalmente Blake se acercó a Volkov abrazandolo a forma de despedida

-les deseo suerte a ambos... Si sucede algo... No duden en llamar- Dijo Volkov dando unas palmadas en la espalda del menor dándole ánimos y algo de tranquilidad, jota también se terminó de despedir de ambos antes de caminar junto a su novio al auto donde se despidió una última vez con la mano antes de alejarse por las calles de la comisaría, Volkov dejo escapar otro suspiro, no esperaba que ellos se fueran pero entendía sus razones, se acercó a ambos agentes que derramabas algunas lágrimas por la ida de su amigo y de H, el mayor dió algunas palmadas intentando animarlos un poco mientras miraban el auto de su amigo perderse en la distancia, sin decir más Volkov entro en la comisaría llendo directamente a su oficina encontrando de camino la oficina de Horacio, dudo unos segundos antes de entrar encontrando todo el equipo del de cresta, suspiro levemente antes de mirar su celular notando que su mensaje aún no era leído, decidió intentar llamarlo pero al hacerlo nadie respondió, nuevamente intento con un mensaje preguntar a Horacio como se encontraba pero está vez solo una paloma apareció, había Sido mandado su mensaje pero no era recibido por el menor, Volkov intento no pensar más en eso, seguro estaba bien y solo se acabó la batería de su celular, era algo normal cuando Horacio estaba despistado, finalmente salió de la oficina del menor y camino hacia la suya dónde ordenó algunos papeles de su escritorio y leyó algunos informes antes de salir de servicio, se sentía algo agotado así que pensó que podría tomar un trago antes de ir a descansar, se subió al auto y manejo hasta el bar donde solía ir siempre, las calles estaban vacías ese día, suponía que el frío y las fechas eran la causa de eso, al llegar al bar noto que este también estaba casi vacío a excepción de dos personas que estaban tomando lo que parecían ser sus últimos tragos, se sentó en el lugar de siempre y ordenó un simple vodka, algo muy común en él, comenzó a beber con tranquilidad mientras intentaba distraer su mente con la suave música del lugar lo cual funcionó un poco, miro lo que parecía ser una pareja de chicos irse del lugar riendo y abrazando el uno al otro antes de salir dejando el lugar en gran silencio, la persona que atendía el bar fue a ordenar algo en la parte trasera del lugar y no había nadie más que Volkov y seguramente no llegaría nadie más hasta en algunas horas, de nuevo solo estaba Volkov y su mente que le hizo repetir esa pregunta en su mente "Y ahora que sigue?" El mayor intento borrar esas dudas de su mente, era clara la respuesta... O no? Solo iba a continuar con su trabajo, iba a orientar bien a Alana y Parker, aunque eran responsabilidad de Horacio y después cuidaría bien de su gata y de su hogar... Aunque... El no estaba seguro de poder orientar a los agentes, tal vez debía pedir un permiso o hablar con alguien para que lo asignarán con él, mientras pensaba en eso su celular comenzó a sonar, detuvo el auto en una luz roja y tomo el celular respondiendo la llamada de Parker

Alone-Volkacio [One-shot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora