Hunting You Heart [Killua x tú]

Cap 41: Una marioneta imprevista

Después de una dura pelea, de buscar sus pertenencias y de caminar unos minutos, llegaron a una tienda de ropa. Aquella tienda tenía por nombre Heavens Angel y por suerte, es una tienda con ropa para mujer. Así que entraron allí inmediatamente.

El vendedor de la tienda, apenas había visto a Retz, se horrorizó al verla sólo con un camisón y sin siquiera zapatos. Así que gritó un "¡Esto debe tratarse con urgencia!", buscó un atuendo completo y la metió de inmediato a los vestidores.

—Eso sí que es velocidad. —Dijo Luna impresionada.

—En menos de un minuto...—Concordó Gon, sorprendido de que todo haya sucedido tan rápido.

—Ese gordinflón ni siquiera nos preguntó para qué vinimos. —Bufó Killua cruzándose de brazos hastiado.— Qué descortés.

—Mira quién lo dice; el señor de la descortesía.

—Cállate, tomate.

—No, tú cállate, canoso.

—Chicos, cálmense. —Espetó Gon un poco nervioso, pero al mismo tiempo se preguntó por qué demonios los está deteniendo. Luna y Killua siempre pelean, ya debió de haberse acostumbrado... De hecho, es algo estúpido intentar calmarlos.

Luego de unos minutos, Retz salió del vestidor con un vestido azul. A Luna y Gon les había gustado, pero al vendedor parecía no convencerle.

—¡No! ¡Este atuendo no es lo que buscamos! —Exclamó el vendedor dramáticamente.— ¡Más dinamismo, más perfección! ¡Este vestido no calza con su figura!

—¿Es mi idea o él estudió teatro antes de ser vendedor de ropa femenina? —Susurró Luna al oído de Gon.

—Ni idea.

—¡Este, pruébese este vestido, bella dama! —Exclamó el vendedor, entregándole otro vestido a Retz. Quien no pudo decir absolutamente nada, ya que no le dieron ni el tiempo de contestar.

Sin remedio, volvió a cerrar la cortina del vestidor con el nuevo vestido. El grupo retomó su espera.

En ese instante, el vendedor miró hacia donde estaban ellos y notó que había otra niña en el grupo. Horrorizandose al ver el atuendo que esta misma llevaba.

—¿¡Qué vestimentas son esas!? ¡Mi Dios, esa ropa no la debería usar una jovencita! —Exclamó dramáticamente, provocando que Luna arqueara una ceja confundida.

—Eeeh... ¿Qué? —Espetó.

—¡Debe cambiarse inmediatamente! —Exclamó, apuntando a Luna.— ¡Debe usar un atuendo más acorde a su figura!

—Oh no, no es necesario. —Dice Luna lo más relajada que podía, la idea de usar vestido la había alarmado. No le gusta usar ropa tan excéntrica o elegante, podría decirse que es incómodo para ella usar vestido.— No quiero arruinar los vestidos en mis viajes, señor. Soy aventurera y podrían desgarrarse.

Aquel señor parpadeó por breves instantes.

—Ooooh.... Es una lástima. —Siseó deprimido.— Cualquiera de mis gloriosos vestidos te habrían hecho relucir como un bello ángel.

—Adulador. —Luna se rascó la mejilla un poco nerviosa, pues nadie le había dicho que era hermosa.

—Pfff... Sí, claro, tremendo angelito se encontró. —Se burló Killua en un tono sarcástico, provocando que Luna le diera un codazo en el estómago, quitándole todo el aire que tenía y sujetándose el lugar afectado con sus manos; adolorido.

Gon vio todo en silencio y miró a Killua incrédulo.

—Eso sí que te lo buscaste, Killua. —Jactó.