𝐈𝐥𝐥𝐢𝐜𝐢𝐭 𝐀𝐟𝐟𝐚𝐢𝐫𝐬 | 𝐊𝐨𝐨𝐤𝐦𝐢𝐧

xiii

-Eres imposible, pero, no lo entiendo. Ahora ya lo sabes todo, no sé porque querrías estar con alguien como yo, estoy usado, roto y no sé si algún día estaré bien, son tantas cosas y la mayor parte del tiempo ni siquiera yo sé qué pasa, soy un desastre. Tú mereces mucho más.

Jimin estaba asustado, él lo conocía mejor que nadie, no quería que esa amistad que tanto apreciaba, llegara a dañarse si accedía, aunque en el fondo de su corazón quería dejarse llevar. No pensar tanto en las cosas.

-No me gusta que te refieras de esa manera hacia ti mismo, pero sabes que nada de eso cambia mi opinión de ti. Quiero estar a tu lado sin importar tu pasado. Podemos resolver este pequeño desastre que es tu mente juntos, hay muchas cosas que podemos hacer para que te sientas mejor, claro que no soy un profesional, tú buscaras esa ayuda cuando sea necesario pero yo estaré a tu lado apoyándote. Y no digas que merezco más, tú eres más que suficiente.

-Yo no sé...

-No te estoy pidiendo nada ahora, sé que tienes mil cosas pasando por tu mente y no quiero presionarte.

-Yo se que tu no quieres presionarme pero he deseado esto por tanto tiempo que solamente no se que hacer, no quiero que todo lo que tenemos se arruine.

-Jimin, no voy a desaparecer. -Le dijo mientras tomaba su mano y la acariciaba. Podía sentir un leve temblor, tal vez era por todo lo que seguramente estaba sintiendo el menor-. Ambos cambiamos en todos estos años, tenemos que conocer esas partes nuevas del otro, sin importar qué decisión tomes, seguiré a tu lado.

El menor tenía tantas cosas en su cabeza que era mucho. Pensaba en Annelisse, como le dolería si se enterara sobre ellos dos, su futuro, todo. Pero, deseaba tanto el amor de Jungkook que no quería dejarlo ir. Quería ser egoísta por una vez en su vida y solo disfrutar del momento, darse la oportunidad de amar y ser amado porque probablemente nadie jamás lo amaría como lo hacia Jungkook, nadie quería a alguien como él, ni entiende ni porqué Jungkook lo hace. Aún así quería entregarle su corazón, solo deseaba amor por parte del mayor.

Jimin abrazó a Jungkook quedando sobre sus piernas y escondió su rostro en el espacio que había entre su cuello. Respiró profundo y después de varios minutos en silencio se separó para verlo directamente a los ojos, los cuales brillaban igual que siempre.

-¿Seguirás viniendo?

-Vendré más seguido si me lo permites.

Jimin giró su rostro sonrojado al lado contrario y tomó su mano donde aún estaba ese anillo que no le gustaba ver. Se lo quitó con cuidado y lo dejo en su palma. Se sentía mal al hacerlo pero si iban a empezar algo juntos no quería ese constante recordatorio que se podía ir de su lado para regresar con Annelisse.

-No me gusta...

-Ya no lo usaré si te molesta.

-¿Crees qué estoy siendo muy egoísta o pido mucho?

-Claro que no. Quiero empezar algo contigo de la manera correcta y entiendo porque no te gusta verlo, no tengo problema alguno dejándolo de usar.

El menor recibió algunas caricias en su mejilla y solo volvió a girar su mirada ya que Jungkook tomó su barbilla de manera suave para poder verlo a los ojos otra vez. Se quedaron en silencio y Jimin decidió hablar.

-Yo te amo con todo mi corazón. No entiendo como te pudiste enamorar de mí incluso en mi peor momento, pero en verdad quiero darnos una oportunidad. Te adoro Jungkook. -Dijo con una pequeña sonrisa-. Se qué hay muchas cosas que tengo que mejorar y lo más seguro es que no será un camino fácil pero yo quiero estar siempre para ti, incluso en tus días malos. Será un placer para mí estar a tu lado.

El mayor solo pudo reírse y lo abrazó atrayéndolo un poco más para tener acceso a dejar besos en sus mejillas. En verdad estaba demasiado feliz. Ambos lo estaban. Sus corazones latían como locos por ser correspondidos finalmente. Se iban a dar un beso cuando del cabello de Jimin les cayó un poco de harina y se rieron más. Tenían que limpiar todo el desastre que habían hecho, la tarta podían seguirla mañana con más tranquilidad. Lo importante ahora era que estarían juntos.

Se levantaron y mientras Jungkook guardaba y limpiaba lo que habían usado en la cocina, Jimin se encontraba aspirando toda la harina que habían dejado por casi todo el apartamento. Tendrían que tomar un baño, Jimin tenía un par de conjuntos que le quedaban grandes que podía prestarle en lo que la ropa se lavaba. Pero, mientras hacían todo eso no podían dejar de darse miradas cómplices con pequeñas sonrisas, al darse cuenta que se estaban viendo se reían, parecían adolescentes, de cierta manera era así. Probablemente no eran el primer amor del otro pero tenían ese sentimiento dulce característico de este.

Al terminar Jimin le sacó un conjunto de pijama y lo dejó en el baño de invitados con toallas y todo lo que pudiera necesitar. Él se fue al baño principal y mientras estaba en la ducha no podía dejar de preguntarse si había hecho lo correcto. Sacudió su cabeza intentando alejar todos esos pensamientos, era la primera vez que en verdad tenía la oportunidad de disfrutar y experimentar amor libremente. Ya no tenía que esconderlo de nadie, claro que ahora habían otras circunstancias pero lo superarían juntos, se sentía bien saber que ya no estaba solo.

Después de tomar el baño, ambos salieron ya listos para descansar, Jimin le tomó la mano por la punta de los dedos con la mirada algo baja mientras lo guiaba a la habitación. Prendió la televisión que tenía ahí pero le quitó el volumen, era solo para no estar a oscuras. Él se recostó en el rincón cubriéndose con las cobijas y ayudó a Jungkook a hacer lo mismo. El mayor tenía una pequeña sonrisa en labios mientras que Jimin no podía ni verlo a los ojos.

-Creo que tendré que conseguir una cama más grande. -El menor habló de primero para romper con el silencio. -Todo porque en algún momento de la vida decidiste hacerte gigante. -Se río y con un dedo delineaba los músculos de sus brazos que se asomaban por la tela de la camisa.

-Culpa mía de que tú te hayas quedado igual que en secundaria no es, cariño.

Jimin le dió un pequeño golpe en el brazo y cubría su rostro con el borde de la almohada, lo había tomado desprevenido con ese apodo.

-Eres un grosero.

-Así te gusto.

-Te odio...

-Me adoras. -Le dijo tomando su mano debajo de las cobijas.

-No lo niego. -Se descubrió el rostro y tomó el pequeño atrevimiento de recostarse en el borde de su almohada para estar más cerca. Se acercó a dejar un corto beso en los labios de Jungkook. -Deja de ser tan tierno, quiero dormir.

Ambos se rieron, Jungkook apretó una de sus lindas mejillas solo para dejarla un poco más roja. Pasó su brazo por los hombros del menor para atraerlo y que pudiera recostar su rostro en su pecho. -Entonces descansemos. Yo te cuido.

Jimin acomodó su cabeza con algo de pena, no podía negar que era agradable, sentir su calidez y escuchar el latido de su corazón. Era reconfortante. No pasaron tantos minutos antes de que Jimin pasara un brazo por su torso y lo abrazara. Levantó su rostro para besar su mejilla y volvió rápidamente a su lugar.

-Descansa.

-Descansa.

Ambos sonrieron y cerraron sus ojos para quedarse profundamente dormidos. Estar juntos seguramente no sería algo sencillo, resolverían las cosas poco a poco. Su amor valía el intento.

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¡Hola! Espero que este inicio de año esté siendo muy bueno para ustedes.

No podré seguir actualizando cada viernes, por el momento serán actualizaciones esporádicas, así cómo esta, pero si seguiré con la historia, no se preocupen. Muchas gracias por el apoyo y el cariño.