No me resulta difícil imaginar un mundo dominado por las mujeres. Sé que si asi fuese, seriamos más comprendidas y menos juzgadas. Mi nombre es Daniella y quiero enseñarte eso que pretenden no conozcas acerca de ti. Cuando digo "eso" me refiero a: ¡...
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"¿Cómo le digo a mi mamá que estoy muriendo?" era lo único que me pasaba por la cabeza. A decir verdad, eso y el dolor no me dejaban pensar bien que era lo que estaba sucediendo realmente. Te cuento que un día como cualquier otro, fui a dormir y el sentimiento de algo mojado en mi entrepierna me despertó́ en la madrugada. Me levanté de la cama lentamente, sin entender que sucedía, y la vi ¡ahí́ estaba! Esa dichosa mancha roja que le dice adiós a mi niñez.
Me costó mucho moverme, estaba perpleja. Y sé que estarás pensando, seguro algo como: ¡Ay Daniella, estas exagerando! Pero tengo la excusa perfecta, este tema de la menstruación si alguien me lo hubiese explicado dos veces, creo que sería mucho. Y ahora, ese momento tan temido o tan querido, estaba aquí. Lo peor era que yo no sabía cuál era el siguiente paso.
Así que, como no sabía qué hacer, más que sentía que estaba muriendo por el dolor, desperté a mi mamá. El susto que le di no fue pequeño, usualmente no la llamo con tanta ansiedad y menos de madrugada. Halé la manilla de la puerta hacia mi sin decir nada, desde lejos se notaba el posible asesinato que pudo haber ocurrido en mi cama. Ella no hizo más que soltar una carcajada, mientras yo sentía que moría. Lo que me pareció más gracioso fue lo siguiente que hizo después de reírse. Solo me miro y dijo: "¡Felicidades, ya eres mujer!".
La sensación de algo deslizándose en mi ropa interior, más ese dolor tan insoportable, y ahora esas últimas palabras retumbando en mi cabeza. No aguanté y estallé. Y ahí estaba yo, llorando porque me tocó ser mujer. Loca yo, si me lo preguntan, todavía no entendía todo lo fantástico que esa frase implicaba.
Tal vez, esta se parezca a tu historia o tal vez no. Cada una lo experimenta de una forma diferente, sin embargo, hay algo en común ocurriendo en el cuerpo de todas. Lo más interesante es que no se reduce solo a toda esa sangre, sino que en tu cuerpo hay hormonas bailando todo el mes para que suceda la fiesta real. Bueno, fiesta dependiendo del punto de vista que lo veas. Pronto entenderás.
Lo que empezó a suceder desde ese día, sucedió porque ya mi cuerpo se había preparado para empezar el ciclo menstrual. Así se llama todo el proceso. ¿Por qué́ ciclo? Es que básicamente es eso, una serie de fases que suceden y vuelven a repetirse en el mismo orden. Todos los meses lo mismo. .
En este caso, el ciclo menstrual, aunque el nombre te podría engañar, no solo es el momento donde llega la menstruación per se. Este crimen cíclico consta de varias, que van sucediendo de manera simultánea:
1. Fase ovárica: Sucede en el ovario y a su vez se divide en:
a. Fase folicular
b. Fase Luteinica
2. Fase endometrial: sucede en el endometrio del útero y se divide en:
