🖼 Extra 1 🖼

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Puede que para muchxs sea una sorpresa lo que sigue (quizás no logren relacionarlo mucho con lo que ya leyeron) pero déjenme decirles; siempre pensé en esta continuación y desenlace. Se me hace bastante lógica.

Advertencia
Hyunjin altamente HOT en las próximas palabras, cuidado con quemarse!!

AdvertenciaHyunjin altamente HOT en las próximas palabras, cuidado con quemarse!!

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Narrador omnisciente

3 años después.

Las rutinas para Hyunjin y Seungmin eran algo importante. No, no hacía su relación más monótona; la hacía más clara y transparente. Hyunjin siempre esperaba un beso de Seungmin cuando se reencontraban, y viceversa. Ya no era rutina; era tradición.

En aquel miércoles a las seis de la tarde, Seungmin ha logrado encontrar un tiempo en su apretada agenda. Ha comprado un poco de comida para llevar, y está vestido con una de sus tantas sudaderas (esta vez, no robadas de Hyunjin) y unos pantalones ajustados. En su espalda lleva el estuche de su guitarra, y tras un largo día de clases, le pesa especialmente.

Una campanita suena con un tintineo apenas abre la puerta del sitio, anunciando su llegada. Una chica detrás de un mostrador levanta su mirada hacia él para saber si se trata de un nuevo cliente, pero la devuelve a su computador de inmediato.

"Hola, Seungmin"

"Buenas tardes Haeil. ¿Ha sido un día duro?"

"Nah. Lo he sobrellevado bien" Contesta ella, quitándole importancia "Hyunjin está en su descanso, atrás"

"Gracias"

Camina por un pasillo que ha atravesado un montón de veces, con dos puertas cerradas a cada lado, una de ellas marcando "Ocupado". Seungmin las ignora; si Haeil no mintió, Hyunjin se encuentra en la parte trasera de la tienda, justo después de los baños.

Llega a una puerta con un cartel de "Solo personal autorizado". Da un par de toques para anunciar que la abrirá, y entra luego de unos segundos. Una vez allí, ve a Hyunjin sentado frente a un escritorio, trazando líneas en un papel, dibujando.

Vaya sorpresa.

Está usando una remera sin mangas que Seungmin le regaló en uno de sus cumpleaños. Su cabello está rubio, un tanto largo por detrás, y sus brazos están llenos de dibujos trazados por él mismo, que se volvieron permanentes luego de que adquiriera su primera máquina para tatuar.

El chico suelta el lápiz apenas lo ve, y sonríe, recibiendo aquel típico beso en los labios, tomándolo del brazo cuando Seungmin intenta buscar una silla para sentarse. Hyunjin no le deja; le tira levemente para que se siente encima suyo, metiendo inmediatamente su mano por debajo de su sudadera, tocando su piel, ansioso.

Aquello, nuevamente, no es sorpresa para Seungmin. Hyunjin era una especie de adicto a su piel, desde el momento en que comenzaron a ser cercanos. Le gustaba tocarla, besarla, dibujarla. Básicamente, no lo dejaba tranquilo y sin toquetear por nada del mundo, pero para Seungmin no era problema. Alguna gente pensaba que era un gesto de posesión hacia él; no entendían que se había vuelto una rutina, algo que ni siquiera tocaba lo sexual o querer marcarlo.

Nuevo lienzo [HYUNMIN, OS]Where stories live. Discover now