Vacaciones De Verano «Larry» Adaptación

𝖴𝗇𝗈

Harry corrió sus ojos hacia Olivia con una velocidad increíble.

-Sabes que ya nunca te amará como te amo.

Harry recuerda las veces que llegaba de trabajar y Louis saltaba para besarlo.

Cuando Harry hacia dormir a Darcy y Leonel para que Louis descansara de su día. Claro, lo hacía para que luego Louis lo besara mucho como agradecimiento.

Esas sonrisas que Louis que le daba, esos ojitos que brillaban cuando lo veían.

Harry asiente, quizás creyendole. -Lo nuestro ya acabó- dice con un nudo en la garganta. Con sus ojos perdidos en el suelo.

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Louis deja caer una lágrima cuando todo está en silencio.

Las turbinas del avión hace un ruido hueco allí. Los demás pasajeros duermen entre algunos despiertos, las luces han bajado y la última iluminación es la luz de la cabina del piloto.

Edward duerme, Harry duerme, los mellizos duermen.

Mira hacia su izquierda donde está Harry junto a la cabeza de Leonel en sus piernas.

-Lo nuestro ya acabó.

Escuchó esas exactas palabras cuando fue por su maleta, y se acercó a Harry y la chica, para escucharlos hablar.

Su voz fue tan clara, las palabras tan dolorosas como un cuchillo recién afilado.

Realmente pensó que esa mierda era mentira y todo volvería a ser como antes, pero Harry nunca volvió para arreglarlo.

Ya no lo odia, siente asco. Que es un menor porcentaje de lo que aún le ama.

Y eso duele... Duele porque quizás Harry sí tuvo la intención de romperle el corazón, y Louis aun amándolo. Eso es doloroso.

Aunque en algún lugar de su corazón sabe que lo que sucedió tiene una explicación que da a entender que no lo hizo con malas intenciones.

Conoce a su Harry.

-Lo nuestro ya acabó.

O quizás no lo conoce como piensa, quizás Harry sí fue capaz de hacerlo.

Esas palabras lo hirieron como no lo penso.

Su matrimonio fue feliz; con caídas y peleas pero no pasó por su cabeza que aquello afectara su relación.

Harry le falló.

No pensó que aquello pasaría. Se veían tan felices.

Harry prometió estar siempre juntos. Prometió que no se separarían nunca y serían felices hasta que sean viejitos... Y le enseñarían a sus nietitos que el amor verdadero existe.

Con su dedo limpia su lágrima cuando Darcy murmura algo. Esta a su lado y lo ha escuchado sollozar.

-¿Que pasó papito?- pregunta preocupada. Su tono bajo por el peligroso silencio.

-Nada nena, se metió algo a mi ojo, eso pasó- explica tocando su pelo, sonríe un poco. Lo que más bien pareció una mueca.

La niña desabrocha su cinturón y se sienta en las piernas de su papá. Toma la barbilla de Louis y hace que la mire.

-No me mientas, ¿porque llorabas?- susurra con un pucherito.

Maldita sea. Su dolor no puede llegar a sus hijos, lo que menos quiere es lastimar a sus bebés con la mierda que siente.

-Ya te dije, se metió algo en mi ojo.

-No te creo. Tus ojos tienen tristeza, mi papi Harry dijo que no es malo llorar, pero cuando algo te duele debes decirlo.