CAPÍTULO 11 - Un pueblo minero

1.7K 171 70
                                    

Había amanecido y los tres chicos habían despertado, Kasper revisaba el barco ya que no había tenido un tiempo prudente para hacerlo antes de zarpar, mientras que Dux repartió algunos suministros de comida lista para degustar como desayuno.

Por otra parte, Dheux, quien parecía ser el más emocionado en un principio por estar en un barco, resultó ser bastante sensible al ligero movimiento del mar, ya que se había mareado tras solo 1 hora de estar despierto, de hecho, se estaba sujetando del mástil intentando aguantar el vómito.

-¡Se larga de mi barco!- Exclamó Kasper.

-Ya, ya, tranquila, yo me encargo- Intentó tranquilizarla Dux -¿Hay jengibre en los barriles?-

-No, pero sí hay limón, soluciónalo rápido, si ensucia el barco yo misma lo mando a la tabla floja- Regañó Kasper.

Dux ayudó a Dheux a llegar hasta la cocina sosteniéndolo de un brazo y la espalda, al llegar lo sentó en un pequeño taburete de madera, buscó un limón y lo rebanó.

-Huele esto muy de cerca- Dux le pasó a Dheux una rodaja de limón.

Dheux agradeció débilmente reteniendo aún las náuseas y olfateó el limón durante un buen rato, mientras se relajaba Dux se apoyó en la mesa del lugar y comenzó a hablarle para intentar distraerlo haciendo que el tiempo pasara más rápido.

-¿Sabes? Yo tuve la suerte de que navegar nunca me dio ganas de vomitar- Dux comenzó a relatar entre risas -Pero recuerdo a alguien, un tripulante de mi segunda tripulación, cuando recién llegó no paraba de ensuciar el barco por todas partes con vómito, todo el tiempo teníamos que darle jengibre deshidratado hasta que se acostumbró al mar-

Tras un rato hablando, escuchando algunas anécdotas graciosas del pasado de Dux y olfateando el limón, Dheux comenzó a sentirse menos mareado al punto de poder ponerse de pie el mismo, pero aún con la rodaja de limón cerca de su nariz por si acaso.

Dux lo hizo caminar lentamente por el nivel medio del barco donde se encontraban la cocina bajo cubierta, el área de camarotes con las hamacas rotas y la cubierta de artillería con cañones sin municiones, al lograr recorrer todo fueron al nivel bajo del marco, donde estaban las bodegas de alimentos, suministros y objetos, había comida suficiente para aproximadamente 3 semanas repartiendo las cantidades entre Kasper, Dheux y Dux, en una de las bodegas habían cofres y compartimientos vacíos, aparentemente para guardar los tesoros que encontraran los dueños del barco, dueña en este caso.

Poco a poco Dheux se estaba familiarizando con el movimiento del barco, pero aún se movía débilmente y llevaba la rebanada de limón a su nariz cada ciertos pasos, Dux no podía evitar burlarse amistosamente, le parecía adorable como el chico al que le fascinaba tanto la vida pirata se mareara en su primera vez navegando un barco.

"Si supieras cómo se mueven los barcos en medio de tormentas y persecuciones" pensó Dux viendo a Dheux sostenerse de las paredes para caminar.

Ya estaba siendo medio día y se sintió un movimiento brusco del barco ante el cual el chico rubio se balanceó y tapó su boca, Dux corrió instintivamente hacia las escaleras para subir, al recordar que Dheux no podía moverse del todo bien solo se devolvió rápidamente para ayudarlo a subir; al llegar a la sobrecubierta Dux vio a Kasper yendo hacia la popa del barco.

-¿Levantaste el ancla?- Preguntó Dux.

-No, pero debería hacerlo, el viento corre fuerte a favor, podríamos movilizarnos bastante en poco tiempo si lo aprovechamos- Respondió Kasper.

Dux ayudó a levar el ancla mientras Kasper revisaba las velas, todo estaba en orden y la castaña corrió al timón, navegaron en línea recta por unos cuantos minutos.

Dux Bogdánov, oportunidad de vida.Where stories live. Discover now