When She Became Mine - Charli D'Amelio Y Tú

Cap 24 - El Beso

Narras tú

Apenas sentí sus labios tocar contra los míos una corriente eléctrica me recorrió de pies a cabeza y sentí que algo estalló en mi pecho.

El beso era algo lento y tímido, con nuestras bocas danzando al mismo tiempo... encajando perfectamente... era un beso con amor y calidez.

Nuestros labios se acariciaban con ternura, pero a la vez con cierta ansiedad porque por fin se juntaban.

Ella subió sus manos hasta mi cabeza, empezando a jugar con mi pelo, volviendome más loco de lo que ya estaba.

Mi respiración se empezó a agitar al darme cuenta que me estaba besando con la persona que más quería en este momento.

Pero algo siempre tenía que arruinar nuestro momento. Esta vez fue el oxígeno.

Nos separamos unos pocos centímetros, pero con nuestras frentes unidas.

Abrí apenas mis ojos para verla.

Estaba con los ojos cerrados, pero con una leve sonrisa con ese rubor en sus mejillas que aniquila a cualquiera, mientras que la luna la iluminaba.

Reí levemente al verla así, viendo como ella abría los ojos sonriendo más de lo que estaba.

Pero en un movimiento rápido, ella me había besado otra vez... pero no como antes.

Este beso era con desesperación, a tal punto que me quedé en shock... aunque se lo seguí sin peros.

Sentía como ella tomaba mi cara con una mano, acercandola más a la suya, mientras que con la otra jugaba con mi pelo.

Pase mi mano hacia su espada, acaricandola levemente, mientras que mi lengua intentaba pedir permiso tocando sus labios levemente con ella.

Charli lo comprendió en seguida, dejando un leve hueco entre sus labios para que mi lengua pasara a encontrarse con la suya.

Las dos lenguas jugaban mientras yo también hacia lo mismo con su pelo, pero con mi mano.

Los dos tratabamos de tener el control en el beso, y aunque los dos seamos un poco tímidos, intentábamos controlar todo. Por eso el beso se hacía cada vez más desesperado.

Hasta que ella cedió el control, teniéndolo todo yo.

Aún podía sentir una explosión dentro mío, con cada choque de labio, rozamiento entre lenguas, o incluso con tocarle apenas el pelo... todo esto me hacia sentir Charli.

Poco a poco fui bajando la intensidad del beso, porque estaba seguro que si seguíamos así, íbamos a terminar en una cama los dos sin ropa... y no es lo que quiero, por ahora.

Nuestras lenguas dejaron de verse, despidiéndose, pero no era un adiós, sino un hasta luego.

Cada vez había menos intensidad, volviendo a como antes, un tierno beso entre dos personas que se gustan... y mucho. Y que a pesar de sus malos momentos, iban a estar para el otro.

Hasta que, nos separamos.

Nos quedamos en silencio con nuestras frentes juntas, igual que antes.

Pero esta vez, al abrír los ojos, vi a una Charli muy ruborizada y con los labios rojos y un poquito hinchados.

Una sonrisa se escapó de mi rostro al verla así, y creo que incluso yo estaré igual.

Nos separamos un poco para vernos mejor. La luz de la luna la iluminaba perfectamente junto a las estrellas de fondo... estaba hermosa.

Igual que siempre.

Pero... ¿qué va a pasar ahora?

No lo sabía, pero no me importaba.

Los dos estábamos ahí, en el medio de la nada.

Con una fogata, la luna y las estrellas de fondo mientras admirabamos a la persona que teníamos en frente, o por lo menos yo lo hacía.

-c-creo que me iré a dormir- dijo Char mirando hacia otro lado

-e-está bien- dije nervioso -yo también tendría que ir

-nos vemos mañana- dijo para irse rápidamente a la carpa

-mierda- dije agarrandome la cabeza

¿y si no le había gustado el beso? Su boca no decía lo mismo.

Pero, ¿por qué se comportó así?

Mejor me voy a dormir, mañana veremos.

Fui hasta la carpa para abrirla y tirarme dentro.

Sin nada que hacer, me metí dentro de mi sobre de dormir para hacerlo.

Y estaba por dormirme, pero una pequeña luz me estaba iluminando.

-pss pss, ¿estás despierto?- preguntó una voz que reconocí en seguida

-si Char, ¿por?

-perdón por el atrevimiento... pero, ¿podría dormir contigo? Es que las chicas no me dejaron espacio- dijo abriendo la carpa

-si, obvio- dije haciendo un lugar donde ella tiró el sobre -si me querías ver no tenías que meter esa excusa- dije riendo

-ya cállate- dijo riendo acostandose

Los dos nos quedamos cara a cara, ninguno decía nada... igual que después de besarnos.

Pero en un movimiento rápido, ella me dio un pequeño beso.

-buenas noches, Andrews- dijo un poco sonrojada sonriendo poniéndose en mi pecho

-buenas noches, D'Amelio- dije sonriendo también acariciando su cabeza

Y finalmente los dos con una sonrisa imborrable en nuestros rostros, nos dormimos.