Capítulo 7: Esto Es Una Pesadilla

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Cuando llegaron a casa, le dijo a Tara que fuera a su habitación y se quedara allí hasta que Paty fuera a buscarla, y ella no debía quitarse el pañal.

"Y si tienes que ir al baño, sabes qué hacer, ¿no?" gritó Paty antes de cerrar la puerta de la habitación.

Tara yacía en su cama llorando a gritos. No tenía idea de lo que iba a hacer su madre. Todo su fin de semana se había arruinado por completo en cuestión de segundos, todos sus "buenos momentos" habían terminado, el destino de Tara ahora estaba en manos de su madre.

Sabía que a estas alturas no habría quien la fuera a ayudar pues cuando Tara era muy joven, su padre murió de un ataque al corazón mientras conducía un camión de carga hacia Georgia. La póliza de seguro que tenía a través de la compañía fue bastante sustancial, pero definitivamente no era algo con lo que pudiera vivir para siempre. Al final Paty decidió que con ese dinero iba a hacer realidad su sueño y volver a la escuela para convertirse en maestra, siempre procurando el futuro de su hija.

Tara ya no sabía qué pensar. ¿Qué iba a hacer su madre? ¿Iba a ser castigada? Mil preguntas pasaban por su cabeza. Sintió la necesidad de orinar, así que lo hizo, no había nada más que pudiera hacer en este momento. Con toda la excitación y emoción de lo que acababa de ocurrir, Tara se sintió muy somnolienta y se quedó dormida.

Mientras tanto, Patricia estaba en la cocina tratando de preparar la cena, pero estaba distraída en gran medida por los pensamientos y las imágenes en su cabeza de su hija de 17 años tendida en una mesa para cambiar pañales. La idea de que Tara hiciera algo como esto, dejará que otra mujer la tratara y la viera de ese modo la enfureció.

"¿Cómo voy a lidiar con esto?", Pensó para sí misma.

"Bueno, obviamente le gusta que la traten como a un bebé, así que tal vez sea eso lo que haga. Será un bebé hasta que se canse", murmuró para sí misma.

Continuó preparando la cena, dejando a Tara en su habitación con una clara intención de hacerla preocupar por su fin de semana y por lo que podría estar por venir. Metió la lasaña en el horno y puso el temporizador en una hora. Luego fue al estudio y encendió la televisión.

Tara se despertó lentamente de su siesta. No estaba segura de cuánto tiempo había dormido, pero decidió quedarse en su habitación como le había indicado su madre.

El pañal de Tara estaba mojado, ahora estaba frío y le picaba, también tuvo que orinar de nuevo. Dejó que su vejiga se vaciara lentamente en su pañal, la primer descarga fue bastante grande y comenzó a preocuparse por que el pañal no tuviera una fuga. La corriente cálida llenó su pañal y se sintió bien. Su pañal frío y húmedo estaba ahora caliente de nuevo y le encantaba la sensación. Estaba saturado al máximo y seguro que si se mojara de nuevo el líquido terminaría corriendo por su pierna. Puso su mano sobre su pañal para sentir lo lleno y blando que estaba. Fue una gran sensación, cálida, suave y pesada. Tara se sintió infantil de nuevo.

Luego escuchó a su madre subir las escaleras y caminar hacia su habitación.

Tara simplemente se quedó acostada en su cama con su pañal a la vista, no había razón para esconderlo ahora. Patricia abrió la puerta y miró adentro. Vio a Tara acostada en su cama con solo el pañal y estaba disgustada. Decidió en ese momento lo que iba a hacer.

"Entonces, ¿cómo está mi bebé?" preguntó en un tono lleno de sarcasmo, aún en ese tono se notaba lo molesta que estaba.

Pero antes de que Tara pudiera responder ...

"¡¡¡Oh, por el amor de Dios !!! Te dejo solo una hora y ya te has orinado !!!" soltó Paty.

Paty acercó a la cama y agarró el pañal de Tara en su mano, apretándolo para ver qué tan lleno estaba.

"¿Qué es lo que te sucede? Mírate, completamente empapada. Supongo que realmente eres un bebé después de todo", dijo.

Tara empezó a llorar de nuevo. Ella solo quería que su madre lo entendiera.

"Mamá, por favor déjame explicarte. No es lo que crees lo que sucedió en la casa de Kathy" suplicó Tara.

Tara estaba llorando mucho ahora y apenas podía hablar con coherencia. Estaba avergonzada, asustada y ansiosa. Aunque le encantaba usar pañales, deseaba que esto nunca hubiera sucedido y que las cosas fueran normales. Pero las cosas estaban lejos de ser normales y Tara temía el resultado.

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Notas de Yume:

Bueno aquí termina la historia original, lamento haber tardado en publicar estas últimas partes pero no había tenido mucho tiempo libre, posiblemente tarde unas dos semanas en publicar el siguiente capítulo pues ya será totalmente creado por mi, intentaré mantener el mismo estilo de redacción pues al igual que muchos de ustedes, es algo que me ha gustado mucho desde que la leí hace poco más de 10 años.

No pienso alargarla demasiado pues no quiero caer en una serie que no tenga fin pues mi objetivo es justo ese, darle un final a la historia de Tara.

También si alguien quisiera hablar conmigo con gusto me pueden mandar un mensaje y no olviden comentar sus opiniones sobre está historia 😘

TaraOnde histórias criam vida. Descubra agora