34. 𝗟𝗮 𝗳𝗶𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗱𝗲 𝗘𝗺𝗮

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Terminamos de recoger la sala y limpiar la mesa y ahora si estábamos listos para ir a la fiesta de Ema. 

Rosie fue rápidamente a su habitación por su bolso y momentos después salimos de su casa. Subimos al auto que gracias al cielo el señor Davenport me había prestado y nos dirigimos a casa de Ema.

Cuando llegamos, pude notar que a simple vista todo se veía tranquilo, a decir verdad no parecía que hubiese una fiesta, o que estaba por comenzar. 

Bajamos del auto y al acercarnos a la entrada pude escuchar una canción desde dentro; el ritmo era pegadizo y transmitía vibras setenteras, me agradaba. Rosie llamó a la puerta y en cuestión de segundo Ema apareció del otro lado de ésta.

-¡Rose!- exclamó y rápidamente la abrazó- ¡Y Chaseee!-al igual que a Rosie, me abrazó- Pasen, pasen, amistades- dijo y entramos. 

Al adentrarnos a su casa pasamos por enfrente de su sala y comedor, los cuales guiaban a un pasillo el cual nos dirigía a una sala de juegos con otra pequeña sala en ella, y para simular la pared que quedaba frente a la entrada de ésta, había unas puertas corredizas de cristal que daban al patio trasero.

-¡Bella!- gritó Sarah en cuanto vio a Rosie salir por el patio- ¡Si viniste!

-Es la fiesta de nuestro Ema, claro que iba a venir- dijo  ella y la abrazó.

-¡Chase, que bueno que viniste!- dijo Sarah ahora dirigiéndose a mí- Me alegro de que hayan terminado el proyecto... Si lo terminaron, ¿verdad?- preguntó inclinándose a mi oído, solté una risa y asentí con la cabeza- Entonces ese es motivo de celebración, vengan- dijo y nos guio al centro del patio en el que se encontraba una mesa con un par de botellas de Vodka y Tequila, una pila de vasos y unos cuantos platos con frituras- Sírvanse, chicos- dijo y pude ver como Rosie se servía Vodka en un vaso seguido por una soda de limón.

-¿Quieres?- preguntó ella volteando a verme para después darle un trago a su bebida y lo analicé por un segundo.

No se suponía que debía beber alcohol, ya que a la larga podía dañar mi chip biónico, pero en ese momento lo puse en una balanza y era... cuidar mi chip biónico y asegurarme de que no le pasara nada, o beber poco y asegurarme de no volver a hacerlo en un buen rato para que mi chip no se viera afectado, claramente ganó la segunda opción.

-Claro- respondí y Rosie comenzó a preparar mi bebida.

Rosie

Le entregué su bebida a Chase, y éste le dio un sorbo tan largo que me sorprendió bastante, considerando que el vaso era mitad vodka y mitad soda, terminó de darle el sorbo e hizo un gesto bastante gracioso que provocó que riera un poco.

-Cuidado, vaquero...- comencé a decir y le di una palmada en el pecho- Si regresas ebrio a casa, será la última vez que tu papá te deje salir conmigo.

-Tenemos dieciocho, tranquila- me guiñó un ojo y asentí, no sin antes dedicarle una sonrisa coqueta. 

Nos dirigimos hacia donde estaba Sarah con Calvin y comenzamos a platicar acerca de que ya teníamos listo el proyecto y de temas sin relevancia que fueron saliendo conforme la conversación avanzaba. Los minutos pasaban y más chicos de la escuela y chicos que no conocíamos iban llegando. Poco a poco el patio comenzó a llenarse de gente lo cual me sorprendió bastante, ya que éste era bastante grande y de un momento a otro ya había un mar de cabezas.

-Enseguida vuelvo... - le dije a los chicos y me dirigí a la puerta de la sala de juegos, entré a la casa y en el pasillo pude ver a Ema que estaba con su celular- Amistad...- dije acercándome a él y volteó a verme- Creí que sería una reunión pequeña.

𝗦𝗘𝗥 𝗖𝗢𝗠𝗢 𝗧𝗨 | 𝗖𝗵𝗮𝘀𝗲 𝗗𝗮𝘃𝗲𝗻𝗽𝗼𝗿𝘁Where stories live. Discover now