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Capítulo 28: El quinto día

Por la mañana, He Yang llegó al distrito de la ribera y recibió a Shen Xiuzhu.

El tiempo en el exterior seguía siendo un poco lúgubre y ventoso en todo momento.

Shen Xiuzhu se sentó en el coche y no pudo evitar estornudar, sus ojos estaban un poco rojos.

He Yang miró y preguntó: "¿Te has resfriado?".

"Supongo que sí..." Shen Xiuzhu se frotó los ojos y añadió: "Por cierto, parece que ayer olvidé mi taza de termo en tu coche..."

Dijo Shen Xiuzhu, luego miró hacia abajo en el asiento y lo buscó.

He Yang le entregó suavemente la taza del termo y le dijo: "He tomado agua caliente esta mañana".

"Gracias". Shen Xiuzhu sonrió y tomó la taza del termo y la bebió lentamente.

De nuevo, como el agua estaba caliente, volvió a empañar las gafas de Shen Xiuzhu al beberla.

El coche se dirigió hacia el muelle y, poco después, se detuvo en la intersección esperando la luz roja.

He Yang tenía una mano libre y se acercó a Shen Xiuzhu.

Shen Xiuzhu, naturalmente, se quitó las gafas y las puso en la mano del hombre, diciendo en voz alta: "Vamos a Zhou Lao para comprar un pastel más tarde".

He Yang sacó un pañuelo para limpiarle las gafas y respondió.

Después de limpiarse las gafas, He Yang ayudó al hombre que estaba a su lado a ponerse las suyas.

Justo cuando el semáforo se puso en verde, He Yang se dirigió a la pastelería de Zhou Lao y compró un pastel para Shen Xiuzhu.

Después de comprar el pastel, el coche se dirigió hacia el muelle.

El cobertizo para botes estaba anclado justo al lado del muelle, y cuando los dos llegaron al cobertizo, ya había bastante gente dentro.

Ji Yi estaba en el sofá y miró de pasada, luego miró detrás de He Yang y preguntó: "¿Dónde está Jiang Lin? ¿No vino?"

He Yang entró y se sentó en el lado, diciendo a la ligera: "Él no viene".

"Por desgracia, hoy incluso he llamado a unos pequeños modelos limpios, queriendo darle un capricho a mi primo pequeño". Ji Yi sonó ligeramente arrepentido.

Cuando un joven rico que estaba a su lado lo oyó, se acercó inmediatamente y se apresuró a decir: "¿Modelos? ¿Cómo es la técnica? ¿Me das uno para probar?"

"Buenas habilidades, bastante buena para atender a la gente". Ji Yi fue un poco burlón e insinuó: "Especialmente esa boca, es tan conmovedora..."

He Yang interrumpió: "Shen Xiuzhu sigue aquí, ten cuidado con lo que dices".

"Está bien, ya no soy un niño". Shen Xiuzhu sonrió: "Yo también puedo hablar de temas de adultos".

"¡Sí, XiuZhu ya no es un niño!" Ji Yi sonrió y se volvió hacia Shen Xiuzhu: "¡Si Xiuzhu quiere ensuciarse, ven a buscarme. Te prometo presentarte a la clase hábil que puede servir!"

"De acuerdo". He Yang frunció el ceño y se limitó a decir a Shen Xiuzhu: "Ignóralos".

Ji Yi dijo al instante: "¡No sigas protegiéndolo, señor He! ¿Qué hay de malo en discutir algunos temas de adultos?".

"Exactamente". Otra persona dijo: "No puedes protegerlo toda la vida, ¿verdad?".

"Ya ha sido así antes, es tan excéntrico. Siempre está protegiendo a Xiuzhu, siempre dice que lo haremos caer..."