Mobster Librarian (Libro 1 Dinastía Indestructible)

Capítulo 12

__ Está bien - acepto por que sé que no tengo opción - Dejalo por ahí

__ Se me fue ordenado no salir de la habitación hasta que usted se termine el desayuno y deje los platos vacíos - siempre de exagerado, ruedo los ojos y comienzo a comer todo. Mentiría si dijera que no tengo hambre pero todo lo que trajeron no podré comerlo, soy de estómago pequeño y mis comidas son pocas, peor ahora que vomito casi todo lo que como. Acabo con dos platos pero el tercero se me dificulta.

Cuando ya comí casi todo la muchacha toma la charola sonriendo complacida.
Sale y entra otra chica más adulta.

__ Buenos días, señora - saluda sonriente - Estoy encargada de ayudarle a darse un baño si así lo desea

¿Dejó personas para todo? Porque a dos de ellas no las conozco. Doy un asentimiento de cabeza porque sé que no puedo negarme. Todas han de estar preocupadas por no perder su trabajo por mi culpa. Entro al baño seguida de ella, quien me ayuda preparando todo. Saco mi ropa y ella la tira en un canasto de ropa sucia. Llena la tina, echa sales relajantes y aromáticas en el agua donde me sumerjo minutos después.

No estoy acostumbrada a este tipo de atenciones pero no me queda más alternativa que aguantar por hoy hasta que Dante regrese del corto viaje de trabajo para poder hablar con él sobre esto. Espero sepa entenderlo y no se oponga a mi petición.

__ ¿Sabes si Dante vendrá en la mañana o en la tarde? - detengo a la chica antes que cierre la puerta con la canasta de ropa sucia en las manos

__ El señor no tiene horario de llegada así que no sé señora, con permiso

Quedo sola en la habitación pero no me molesta, al contrario, he pasado acompañada casi todo el día y un momento a solas es lo que necesitaba. Me acerco a la ventana y la vista es impresionante, con la puesta de sol mucho más. Tiene un jardín extenso con un camino pedregoso que da un paisaje digno de capturar. Es hermoso, me gusta caminar unos minutos por el lugar cuando estoy aburrida de estar solo aquí adentro

Imagino a mis hijos corriendo por ahí cuando Dante quiera tenerlos aquí. Él tendrá el derecho de traerlos consigo cada que quiera. Será un buen padre por lo visto. Me río al proyectar la imagen de Dante y los niños corriendo en este jardín.

En unos años estaremos con una pareja pero para ambos el bienestar de nuestros hijos será prioridad, lo hemos acordado antes, aun después de lo que ha sucedido no somos pareja que se separó así que no me preocupa el que tengamos peleas absurdas frente a ellos. Me giro y veo dos fotografías enmarcadas en la mesa que hay a un lado del clóset gigante. En una está Dante con dos mujeres mayores y en la otra está solo él la cual tomo detallando la imagen. Se muestra sonriente como pocas veces lo hace. Sonrío como boba pasando los dedos por el vidrio que cubre la fotografía. Viendo atentamente noto que hay algo atrás de él ¿eso es una mano? No me había fijado bien en ello pero creo que lo es. Acerco más la foto a mi rostro y sí, definitivamente es una mano que está en su cintura. Saco la fotografía y una parte esta doblada hacia atrás...

¿Quien es ella?

Al desdoblar el cuerpo de una mujer aparece a su lado tomándolo de la cintura. Se nota que es una mujer por el cuerpo y lo que viste, pero la parte donde estaba su cabeza fue quemada

Una molestia se instala en mi estómago por alguna razón pero prefiero ignorar porque no tiene sentido. Doblo nuevamente la fotografía pero al intentar tomar el portarretratos para colocarla de nuevo...

El vidrio se hace añicos al caer al piso y brinco como reflejo. Me agacho rápido intentando recoger todo antes que alguien lo vea pero al tomar un trozo me corto la palma de la mano como consecuencia de mis temblores por los nervios de ser descubierta. No le pongo atención y sigo recogiendo todo con la otra mano mientras trato de no dejar manchas de sangre. Busco una bolsa y los meto todo en ella, los vidrios, el marco y la fotografía. Después veré que hago con ella, por ahora tengo que desinfectar la herida.