Esposa del CEO 2

Capítulo 19

Siguió mirando la fotografía en su móvil, era completamente imposible que una clínica de tan alto prestigio llevara reportes falsos, así que ¿Qué tan alta era la probabilidad de que Edith mintiese con respecto a las fechas de su aún muy cuestionable embarazo?

— Como sea, al demonio. Ya he tenido suficiente de esta mierda.

Realmente no quería ser la primera en contactar de vuelta a Lucien desde la redada, todavía había algo de culpabilidad dentro de ella e incluso una de sus bailarinas más queridas fue herida también.

Pero no tenía tiempo que perder, simplemente presionó el botón de Enviar adjuntando el mensaje:

'¿Crees que con eso puedas averiguar los últimos movimientos de la cuenta y a quién le pertenece?'

Ni siquiera transcurrieron cinco minutos antes de que recibiera como respuesta un mensaje, en él vendrían escritos una fecha, hora y lugar de reunión, Anastasia quiso reírse de solo pensar que Lucien le haría el favor sin pedir nada a cambio, por supuesto, nada era gratis en la vida, y aunque no quisiera, ella también terminaría pagando el costo.

*   *   *

El siguiente problema estaba en encontrar una forma para que Erick la dejase salir sola, lo cual se veía imposible desde el mismo momento en que fueron raptados, incluso antes.

Hasta donde recordaba que pudo salir sola fue gracias a que de alguna manera se las arregló para fugarse, de cierto modo tenía la sensación de que esa vez no sería diferente, pero, tenía la pequeña esperanza de que hubiera una diferencia.

— Erick, me gustaría salir esta noche. — Comentó de pronto.

Él pausó su comida, miró a Anastasia.

— ¿Tiene que ser esta noche? Estoy un poco ocupado pero mañana podemos-

— Me refiero a salir yo... Sola. — Por alguna razón ni siquiera pudo mirarlo a los ojos, como si lo que estaba tratando de pedir fuera demasiado. Antes de que el ambiente se volviera más incómodo siguió hablando. — Solo... Solo quiero salir, han estado pasando tantas cosas que creo que-

— ¿Acaso ya no te doy todo lo que necesitas? ¿Estás insatisfecha con las cosas que te he dado hasta ahora? — Dijo Erick, interrumpiéndola. — ¿Salir sola justo durante la tormenta que tenemos encima? ¿En qué diablos estás pensando?

de cierta manera Anastasia ya tenía la certeza de que no sería tan sencillo.

— Sé que quizá es una locura y que solo estás preocupado pero... — Anastasia suspiró — Erick, a veces me siento como una reclusa, nunca me dejas salir sin compañía, monitoreas cada paso que doy y las actividades que realizo durante el día te son informadas por medio de tus subordinados, todo lo que te estoy pidiendo es un poco de privacidad, nada más.

— ¿Estás bromeando? Eres mi esposa, por supuesto que tengo derecho a saber dónde estás ¿Qué haré si te pasa algo y no puedo encontrarte?

— No soy una niña, Erick. Sé cuidarme sola.

— ¿Y gracias a quién es que puedes cuidarte sola?

— Ten por seguro que no es gracias a tí.

El estómago se le hizo un nudo, de un momento a otro ambos intercambiaron miradas cargadas de un enojo incomprensible, la comida quedó en segundo plano.

— Como sea, no necesito tu permiso. Soy una mujer adulta. — Continuó Anastasia. — Pensaba salir de todas maneras, aún si no me dabas tu aprobación, ni siquiera sé para qué te pregunté.