Rui sabía que ya te habías ido hace tiempo, pero te encontraría, no importaba que te trajera de vuelta a casa para ser parte de su familia.

Él te quería mucho, así que seguramente tú sentirías lo mismo, ¿verdad? Eso esperaba.

Mientras trataba de orientarse lo mejor posible hacia donde iba, se topó con alguien que no esperaba ver por este sitio en absoluto.

Muzan Kibutsuji.

Había aparecido justo delante de Rui de la nada. Había veces que Muzan había empezado a tomar la forma de una mujer de repente, pero Muzan parecía haber decidido ser un hombre hoy.

Su presencia asustaba e intimidaba a Rui, pero éste no vaciló. Tenía un objetivo que cumplir, así que se quitaría lo que fuera de encima rápidamente para poder volver a buscarle.

-Hola Rui.-Muzan sonrió.

-Hola...Señor Muzan...

-Parece que mi pequeña luna inferior ha encontrado a la misma mujer que he estado tratando de encontrar desde hace tiempo.-Muzan sonrió, acercándose al pequeño demonio araña, haciendo que Rui retrocediera un poco.

-¿También estás buscando a T/n?-preguntó Rui al intimidante demonio.

-Por supuesto que sí. Su sangre es tan deliciosa que necesito tener más. Prácticamente no puedo sobrevivir sin ella. La sangre de cualquier otro humano me resulta insípida, pero me ha mantenido vivo. ¡Pero ya no puedo soportarlo! El sabor insípido me está volviendo loco, y si no consigo un poco de su sangre pronto, perderé la poca cordura que me queda.

Rui frunció un poco el ceño, pudiendo notar ya cuánta racionalidad había perdido Muzan. El Muzan de ahora estaba mucho más loco y enloquecido que el Muzan normalmente tranquilo y racional.

-¿Y por qué me dices esto? Tienes una petición para mí o algo así.

-En realidad sí. Quieres ir a verla, ¿verdad?

Rui no estaba seguro de si debía decir la verdad o mentir. Decir la verdad podría costarle la vida, pero decir una mentira también podría costarle la vida. Decidió arriesgarse y asintió lentamente con la cabeza.

-Bueno, en ese caso, no será exactamente seguro que te pasees por ahí con ese símbolo de la luna baja en los ojos. Puedo usar un poco de mi magia demoníaca para quitarte el rango y hacer que parezcas un humano ante todos. El único que no te verá como humano será Y/n. Ella podrá seguir viéndote como te ves ahora.-dijo Muzan en tono juguetón.

Rui tuvo que admitir que la oferta sonaba tentadora. De esta manera, no sería perseguido por los cazadores de demonios y podría quedarse a su lado.

Sin embargo, Rui seguía sintiendo curiosidad, tenía que haber una trampa en esto.

-Debo hacer una pregunta. Cuando dices que apareceré como un humano ante todos los demás, ¿a qué te refieres exactamente?

-Me refiero exactamente a lo que he dicho. Parecerás un humano normal. O en otras palabras, aparecerás como lo que parecías antes de morir.

Rui se quedó en silencio, conmocionado, ni siquiera sabía que existían poderes demoníacos como ese. ¿Y seguirá pareciendo exactamente igual que ahora para ti? La oferta era demasiado buena para dejarla pasar.

-Sin embargo, te seguirá afectando la luz del sol, así que te sugiero que lleves un paraguas contigo en todo momento. Di una excusa como "mi piel es muy sensible al sol", bastante creíble, ¿no crees?

-¿Hay alguna trampa en todo esto? Me cuesta creer que sólo hagas esto sin esperar nada a cambio.-dijo Rui sin tapujos.

Muzan no pudo evitar la gran sonrisa que cruzó su rostro.

-¡Me has pillado! Sólo necesito que hagas una pequeña cosa por mí Rui...

Muzan hizo una pausa, con los ojos brillando de emoción, y luego dijo,

-Mientras consigas un poco de su sangre para mí cada semana sin que ella se dé cuenta, puedo garantizarte una vida llena de felicidad permaneciendo a su lado.

"ENTONCES, ¿TENEMOS UN TRATO RUI?"

𝐒𝐀𝐕𝐄 𝐌𝐄~𝗬𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗲 𝗞𝗶𝗺𝗲𝘁𝘀𝘂 𝗻𝗼 𝘆𝗮𝗶𝗯𝗮 *EN PAUSA*Where stories live. Discover now