~04~

12.4K 1.1K 474
                                    



Dejaste de llorar hace tiempo, y decidiste buscar a Giyuu para disculparte por salir corriendo.

Miras a tu derecha y ves a Sabito caminando a tu lado.

-Entonces, ¿vas a seguirme a partir de ahora?-preguntaste al chico.

-¡Eres la segunda persona que conozco que puede ver, oír y tocarme! Así que, ¿por qué no me iba a interesar?

-Así que eso significa que eres un fantasma, ¿eh? Eso está bien. Pero mantengamos la charla al mínimo, así la gente no me mirará raro.

-Entendido. Es un punto justo, así que haré lo posible por no molestarte tanto.

Luego inclinó la cabeza hacia ti, como si estuviera pensando en algo.

-De todas formas, ¿por qué buscas a Tomioka? Pensé que no querrías volver a verlo desde que te hizo llorar.

Miras hacia un lado, exhalando un repentino suspiro.

-Yo también lo pensé, pero creo que lo mejor sería disculparme por haber salido corriendo. No debería haber dejado que sus palabras me afectaran tanto.-una sonrisa forzada adornó tus labios mientras recorrías el bosque en busca de Tomioka.

Al final lo encontraste después de una hora, te sorprendió ver que  te seguía buscando. Le llamaste.

-¡Tomioka!-le llamaste, agitando la mano en el aire.

Tomioka se giró hacia la voz, y sus ojos se abrieron de par en par al verte allí de pie, sonriendo como si no acabaras de huir a un bosque de peligro.

Empezó a correr hacia ti, y te preparaste para que te golpeara, pero te sorprendió que de repente te envolviera en un abrazo.

Era incómodo tener a Sabito allí mirando, pero rápidamente te olvidaste de que estaba allí cuando empezaste a sentir que la manga de tu haori se mojaba.

-¿Tomioka?-preguntas, demasiado aturdida como para moverte cuando Tomioka empieza a sollozar de repente, con ocasionales mocos mientras acurruca más su cabeza en tu brazo.

-¿Qué pasa...?-tu repentina pregunta fue cortada por Tomioka, que de repente te agarró del cuello de la camisa. Te levantó a su altura, tratando de mirarte pero sin conseguirlo. Su cara estaba roja y sus ojos no dejaban de producir lágrimas.

-¿Qué pasa? ¿QUÉ PASA?-grita, haciendo que te estremezcas por su dureza.

Te dejó en el suelo y te abrazó de nuevo.

-Pensé que te había perdido... pensé... que te habías ido para siempre...

Continuó después de tomar un muy necesario respiro.

-¡Pensé que un demonio te había comido! Pensé que habías muerto por mi culpa. Estaba constantemente gritando y buscándote, odiándome por lo que dije... odiando que te hice llorar y huir...

Te abrazó aún más fuerte que antes, como si creyera que ibas a desaparecer.

-¡No quiero volver a perder a alguien! No quiero estar sola otra vez... así que por favor...


"NO ME DEJES SOLO NUNCA MÁS".

𝐒𝐀𝐕𝐄 𝐌𝐄~𝗬𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗲 𝗞𝗶𝗺𝗲𝘁𝘀𝘂 𝗻𝗼 𝘆𝗮𝗶𝗯𝗮 *EN PAUSA*Where stories live. Discover now