Hello eat books [Nagisa Shingetsu x Fem!Reader]

ꦽᰰꨩ🍡𝐇𝐨𝐰 𝐋𝐨𝐧𝐠..."𝐅𝐫𝐢𝐞𝐧𝐝𝐬" ꨄ︎

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   ꓸ 𖨂 ׄ🌱 Cuánto tiempo..."amigos" 🍡⊹ꓸ ׄ
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— ¡Que demonios estás pensando pedazo de idiota! — Exclamó la menor a el chico.

— ¿Eh?

— ¡Mira tu estúpida muñeca! ¡¿Crees que nos dejarán irnos así como así sin tener concecuencias?! — Volvió a exclamar la menor. — ¡Esa puta mierda es la misma que tiene Komaru, y déjame decirte que podrás morir se vas para haya o intentas algo! ¡Así de simple, así que deja de creerte un maldito superhéroe, y enfócate en seguir con vida! ¿¡Si te mueres como mierda crees que podrá reaccionar tu hermana mayor!?

— L-la mocosa tiene razón en eso... — Hablo la chica de lentes.

— Gracias, Fukawa-san — Dijo de esta un poco más calmada. — Vamos, tenemos que encontrar al culpable ¿no?

Cuando el chico intento tirarse al mar, la más pequeña lo detuvo, que sin pensarlo, había evitado una muerte, junto con un dolor que podría permanecer en el corazón de una adolecente/adulta en otro lado de Japón.

Ahora estaba completamente nerviosa, resulta que su madre había vuelto para llevarla pero se desató el caos, le hacía feliz el hecho de que no se haya olvidado de ella, pero estaba triste de no verla y abrazarla, enojada por el causante de la situación.

— Si me hubiera muerto, me hubiera evitado tantos problemas...no estaría en esta situación, estaría en el paraíso, con el descanzo infinito, o hasta que me toque otra vida.

No sabía en qué lugar estaban caminando, no reconocía el lugar, ahora todo se veía igual, cadáveres de adultos, niños con cabezas de osos, sangre, autos volcados, fuego y demás.

Hasta que vio cierto color que llamo su atención.

— Es... — Se acercó al cuerpo de una mujer que estaba tirado por allí.

— ¡Oi! ¿Que estás haciendo? — Escucho a Fukawa hablar.

— ¿T/n-chan? — Pregunto la Naegi.

— Es la madre de Jataro... — Murmuró. Vivian todos cerca de los otros, Jataro era el que estaba más alejado, por así decirlo. Sin pensarlo, hecho a correr.

— ¡T/n! — Exclamó Yuta.

Pero la pequeña siguió corriendo, hasta que llegó a la tercera casa de esa cuadra. Dos cuerpos.

— Los padres de Masaru... — Fue a la casa de enfrente.

Una casa de color Veig totalmente destruida. Dos cuerpos, una mujer y un hombre.

— Nagisa... — Los lentes de la madre del mensionado rotos, sangre bajos sus cuerpos. — Kotoko y Monaca...la casa de Monaca es al frente...

Diversos cuerpos, eso era lo que había.

— Sus padres y hermanos...

Se hecho a correr en dirección a la casa de Kotoko. Su mejor amiga tenía que estar allí, tenía que estarlo.

Cuando llegó a la gran casa, vio tres cuerpos, su madre y padre, junto con una señora que ella desconocía.

Todos tenían álgo en común, no estaban los cadáveres de sus amigos. Hasta que la ampolleta se encendió.

— No están ninguno de ellos, no quiero pensar que ellos son los culpables de todo este caos. Pero la inteligencia de Nagisa y Monaca don grandes, capaces de hacer esto, el talento de Jataro también, las habilidades físicas de Masaru igual, y Kotoko, ella no es tonta, ella sabe lo que es malo y bueno, solo que se deja manipular muy fácil, eso lo sé. Entonces ellos...ellos son los culpables de esto, ellos están detras, pero en dónde se encontrarán ahora...

Fue demasiado tarde cuando de repente vio todo negro.

No sabía por qué razón estaba tan calmada cuando no podía ver ni hablar. Solo veía oscuridad, se le hacía raro el por qué su respiración era calmada, y de que ella estaba totalmente tranquila, no tenía explicación para eso.

Hasta que escucho una puerta abrirse. Sintió alguien cerca de ella, sacando la venda de sus ojos y la cinta de su boca.

No podía creer a quienes estaba viendo, estaban todos sus amigos presentes, aunque nunca concidero como una amiga a Monaca.

— (T/n)... — Reconocería la voz de Kotoko por más que el tiempo pasara.

La expresión de sorpresa que invadia a Masaru, Jataro, Kotoko y Nagisa eran únicas. Al parecer ellos no tenían esperanzas de encontrarla, ni ella a ellos.

Monaca, ella estaba sonriendo, puede que los demás confíen en ella, pero para (T/n) esa sonrisa demostraba enojo, frustración, nerviosismo y no podría distinguir más.

Pero esa sonrisa era totalmente falsa. Eso no pasaría en alto por ella.

— Cuánto tiempo...Nagisa, Masaru, Jataro, Kotoko y Monaca... — Hablo haciendo una sonrisa, mientras que una sombra se hizo presente en su rostro. — Últimamente se han estado divirtiendo mucho a mi parecer.

Silencio, ella era la única que hablaba.

— Cuánto tiempo...amigos — Dijo haciendo una sonrisa más falsa que la de Monaca. Una sonrisa que mostraba un montón de sentimientos.