West Alpine

¿Un Solárium?

Kara no vio a Lena durante otra semana y media. Era un fin de semana y Kara estaba en su pausa para el almuerzo. Normalmente, cuando estaba de patrulla, Kara simplemente comía en su coche patrulla o conducía de regreso a la estación. Ese día, sin embargo, decidió darse un capricho con algo de comida. Había echado de menos el deportivo coche negro en el estacionamiento cuando estacionó frente al restaurante, ni se dio cuenta de Lena cuando entró por primera vez. Kara se quitó el sombrero y se dirigió directamente al mostrador del restaurante, tomando asiento en el vibrante heces. De inmediato, la camarera habitual, Eleanor, se acercó a ella y le puso una taza frente a ella.

Buenas tardes, oficial. ¿Cómo va tu turno? Cogió la taza de café que parecía tener siempre en la mano y vertió una generosa cantidad en la taza de Kara. En realidad, es bastante accidentado. Seis multas por exceso de velocidad y algunos adolescentes sin autorización ”, respondió Kara con su sonrisa burbujeante. “Eh, no dices… ¿Sabes lo que quieres? ¿Lo normal?" Eleanor ya estaba escribiendo la orden de Kara. "Solo si me dejas pagar esta vez", respondió Kara, frunciendo el ceño cuando la camarera se rió.

Eleanor hizo un gesto hacia el restaurante lleno de gente. “¿Parece que una comida gratis nos dejará sin trabajo, cariño? Está en la casa; te guste o no." Kara sonrió agradecida, mirando a Eleanor alejarse para decirle a la cocinera su pedido. Se sentó en silencio por un momento, balanceando su sombrero sobre su rodilla mientras mezclaba un poco de crema y una obscena cantidad de azúcar en su café. Sopló la bebida humeante antes de tomar un sorbo con cuidado, mirando casualmente a las personas que la rodeaban.

Fue entonces cuando su mirada se fijó en Lena. Estaba sentada sola, leyendo lo que parecía ser una revista de ciencia. Casualmente se inclinó hacia el tenedor en el plato frente a ella, sin siquiera mirar mientras cuidadosamente apuñalaba algunos trozos de lechuga de la ensalada que estaba comiendo. Por un momento, Kara quiso levantarse para ir a saludarla, pero se detuvo cuando supuso que estaba ocupada o que quería que la dejaran sola. Se quedó sentada en su taburete, mordisqueando su labio mientras luchaba contra el impulso de seguir mirando a Lena. Para mantenerse ocupada, Kara sacó su teléfono y comenzó a navegar por las redes sociales.

Después de unos minutos, Kara recibió su almuerzo, agradeciendo a Eleanor forzando un billete de veinte dólares en su mano antes de volver su atención a la comida; una enorme hamburguesa doble con todos los aderezos y papas fritas extra. Agarró un poco de salsa de tomate y lo roció generosamente sobre su hamburguesa y al lado para sus papas fritas. Tomó un gran bocado de su comida, sosteniéndola con ambas manos. No pudo evitar gemir a través de su bocado de jugosa carne, dando un gesto de aprobación a Eleanor cuando la miró. Prácticamente devoró su hamburguesa en unos pocos bocados, tan atrapada en los sabores que no notó que Lena Luthor la miraba.

Kara estaba preparando sus papas fritas cuando notó que alguien caminaba a su lado. Se quedó paralizada, a mitad de un mordisco cuando sus ojos se encontraron con los de Lena. Rápidamente se enderezó y se tapó la boca con una mano mientras decía: "Buenas tardes, señorita Luthor". Lena le sonrió, luciendo muy divertida. "Buenas tardes. ¿Estás disfrutando de tu almuerzo? Kara masticó frenéticamente su comida, tragando mientras asentía. “The Diner es mi lugar favorito para comer. Tienen las mejores hamburguesas ". Lena miró las pocas gotas de grasa que eran los únicos restos del sándwich de Kara en el plato, riendo. "Puedo ver eso."

Lena hizo una pausa visible, sus ojos mirando por todo el rostro de Kara. "¿Hay algo en lo que pueda ayudarte?" Kara miró alrededor de la cafetería para ver si alguien miraba a Lena con extrañeza. Algunas personas rápidamente apartaron la mirada, pero ninguna parecía hostil. "Bueno, solo quería disculparme por haber sido tan grosero cuando nos conocimos". Kara parecía confundida, frunciendo las cejas mientras miraba a Lena. ¿Maleducado? ¡Ella no fue grosera en absoluto! "Sentí que prácticamente me escapé, y solo quería hacerte saber que no estaba huyendo de ti". Los ojos de Kara se agrandaron y extendió las manos frente a ella. “¡No pensé eso en absoluto! Sé que estabas estresado por lo que pasó y entiendo completamente por qué te fuiste. Yo habría hecho lo mismo si algún cretino me acorralara así ".