lovely. ┊ w/ rindou haitani.

fourth.

el cuerpo de la chica estaba decorado por múltiples hematomas, cuyos colores eran una mezcla de morado con verde claro.

—¿no haz venido durante dos semanas porque él no te lo permitía, o porque querías esconder los golpes de mí?

preguntó, tocando delicadamente cada zona golpeada, queriendo asegurarse que no hubiera nada grave.
sabía que algo roto no tenía, de lo contrario hubiera sido incapaz de ir hasta ahí y mantenerse parada.

—no quería que me vieras en ese estado, a parte de que también estuve en cama intentando recuperarme. él me compró medicinas y otras cosas para que el dolor se fuera rápido.

—en otras palabras, te manipuló para que sientas lástima por él. se tomó la molestia de comprarte lo que necesitabas para que lo vieras como el bueno de la película, algo así como "la he cagado, lo sé, por eso traje esto para ti, así te recuperas".

ella no respondió, no es que le haya molestado o herido las palabras de rindou, es que tenía razón y no podía debatir sobre el tema.

—veo que los hematomas tardarán en desaparecer, ¿te compró una crema?

—no.

—bien, entonces espérame aquí. hay una farmacia en la otra cuadra, iré a comprarla.

—no, rindou, no te vayas.

pidió, agarrándolo de la mano para que no diera otro paso.
el de cabello lila vio que en los ojos contrarios se reflejaban el miedo y la desesperación.

—preciosa, es sólo una cuadra, ¿bien?, nada te pasará, cerraré la puerta con llave así no entra nadie. necesito comprar esa crema para tus golpes.

volvió a acercarse a ella, depositando un beso en su mejilla, queriendo tranquilizarla.
(n) pareció relajarse ante el beso y las palabras, pues deshizo el agarre en la mano de él.

—lo siento.

se disculpó por su comportamiento, seguramente se vio infantil pero temía por su vida y por rindou también. no quería que algo le pasara por juntarse con ella.

—no hiciste nada malo, (n), no me pidas perdón. ya vengo, mientras tanto cuida esto por mi.

rindou se quitó el abrigo y lo colocó en los hombros ajenos, sabía que así se sentiría más segura. (n) sonrió, asintiendo para luego tomar asiento en el borde de la cama.

él salió, tanto de la habitación como del hotel, cerrando la puerta previamente.
caminó esa cuadra y al ingresar a la farmacia compró una crema que servía para que el dolor de los hematomas no fuese tanto y también ayudaba a que desaparecieran.

a la fémina no le gustaba verse los golpes, en más de una ocasión se lo dijo; que sentía asco por permitir que alguien abusara de ella, pero que no huía por miedo a ser asesinada.

caminó media cuadra más, dando con un pequeño mercado.
cuando comenzó a ser el amante de (n) se aseguró de que el hotel donde fueran los encuentros estuviese localizado en un sitio cercano a tiendas, porque sabía en dónde se metía, y que por ende necesitaría comprar comida, vendajes y demás.

compró un par de golosinas, sabía que a la otra le gustaban muchísimo las cosas dulces y él quería distraerla. en cuanto tuvo todo volvió al hotel, afortunadamente no tardó mucho tiempo, al ser de tarde la gente ya no salía, por ende no había fila en los locales.

abrió la puerta de la habitación y la cerró una vez estuvo dentro, encontrándose a (n) aún sentada en el borde de la cama, cabizbaja, parecía pensativa.