Stiles y los Hale

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Llegaron a la mansión Hale bastante rápido, Stiles pudo sentir el cambio de ambiente desde que atravesaron la barrera mágica, Talia definitivamente no estaba arriesgando de nuevo a su familia

Cuando atravesaron la reja ya podía ver los ojos rojos de su alfa, esto solo hacía ver lo preocupada que estaba Talia y Stiles solo pudo sentirse culpable por ponerla en ese estado

— Aleja esos pensamientos—le ordenó Laura, Stiles bufó un poco, por supuesto que la privacidad no existía con los hombres lobos

— No me gusta verla así... menos por mí—Laura le lanzó una de esas miradas que le indicaban que estaba siendo un idiota a sus ojos. Iba a decir algo, pero ambos fueron interrumpidos cuando la puerta se abrió y Stiles estuvo en los brazos de la matriarca de la familia

— Apestas a ansiedad y estrés—dijo después de olisquearle el cuello, Talia lo alejó un poco— vamos a la cocina, ya tengo un té hecho y me vas a decir todo—dijo en un tono que no dejaba espacio para replicas, el menor no intentó darle una, hasta él sabía que batallas debía dar como perdidas

Una vez que estuvo sentado en la mesa de la cocina con una enorme taza de algún té que Deaton hubiera configurado y envuelto en los brazos de Laura, Talia exigió la historia

— Los Argent están de vuelta, no se quienes, solo sé que una de ellas está en mi clase de biología... escuché el apellido y... tuve un ataque de pánico—bajo la mirada avergonzado, además de que los ojos de Talia habían vuelto a ser rojos, esta vez por el enojo que sus palabras le provocaban, no es que fuera su culpa, pero bueno ¿quién le hacía caso al dicho de 'no mates al mensajero'? Exacto, nadie y las películas estaban plagadas de este ejemplo

— Hey—Laura le susurro en el oído— no es culpa tuya—acarició sus brazos en un intento de relajarlo— nada es tu culpa—el asintió con la cabeza, pero ni él se lo creía mucho

— Stiles cariño—la mano de Talia alzó su rostro, sus ojos habían vuelto a ser cafés, ya no había enojo en sus facciones— no es tu culpa y agradezco que me lo digas—lo abrazó haciendo de él un pequeño sándwich

— Todo estará bien, te vamos a proteger—Laura trató de reconfortarlo, pero no era por él por quien temía, a él su vida no le importaba tanto, no es que fuera suicida, pero estaba seguro de que sin la familia Hale a su lado... bueno no sabía que tanto deseaba vivir si algo les llegara a pasar

— Esto es tan enternecedor—la burla de Peter los hizo separarse, Talia le sonrió a su hermano negando con la cabeza mientras iba a preparar más té— hola cachorro—Peter le revolvió el cabello— hueles tan bien como siempre—dijo con sarcasmo, según había escuchado la ansiedad y él estrés no olía especialmente a rosas

— Y sigue siendo menor de edad, como siempre—amenazó Laura, Stiles rodó los ojos, los coqueteos de Peter habían comenzado un año antes, cuando dejó tener cuerpo de niño, aunque Stiles estaba seguro de que esos coqueteos eran puro juego, principalmente porque nadie podría enamorarse de él, mucho menos alguien tan atractivo como Peter

— Ahora hueles a depresión, deberías calmar tus pensamientos—dijo Peter tomando la taza que Talia le ofrecía— ¿ya tomaste tu adderall? —Stiles le sacó la lengua antes de beber un poco más de té, no iba a dignificarlo con una respuesta— ¿estamos seguros de que queremos convertir a un niño con TDHA en hombre lobo? —miró a Laura alzando una ceja, Stiles se encogió un poco más en sí mismo, él tenía un punto, como siempre claro está

— Estoy más segura de él de lo que estoy de ti—Laura respondió con una sonrisa de lado— además, Stiles será mi primer beta—besó la cien del chico