12; Nubes grises.

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A pesar del cielo cubierto por las densas nubes grises, el calor sofocante no disminuía ni un poco. Los insectos estaban más molestos y mientras Son Chaeyoung intentaba a partir inútilmente las moscas de su rostro cubierto en sudor, uno de sus hombres la alertó.

— ¡Llegamos!

Volvió sus ojos hacia el frente, viendo a lo lejos como la silueta de lo que parecían ser casas se alzaban frente a ella. Por fin llegaba al pueblo de los Myoui.

Tragó con lentitud el excedente de saliva en su boca y mantuvo los ojos firmes en aquel lugar mientras se adentraban. Al contrario de lo que creía, las casas no estaban apartadas entre sí, sino a penas separadas por una parcela de césped entre si. Debía admitir que el pueblo se veía tranquilo y muy bien cuidado. Las casas tenían el aspecto típico del Japón. 

Mientras el coche avanzaba, los lugareños los veían con miradas cautelosas y recelosas. Chaeyoung no sabía que ver un automóvil no era muy común allí, a menos que fueran la de su gobernante.

Al cabo de unos minutos, divisaron la que era - seguramente- la casa de Akira Myoui. Los coches se detuvieron frente a ella y sólo segundos después, una cantidad prudente de hombres barricaron el lugar, impidiendoles el paso.

Los sujetos de muy buen porte físico, se veían inamovibles y alertas ante cualquier movimientos. Felíx se ofreció a caminar hasta ellos y hablar.

— Buenas tardes.— Su asentó fue a penas entendible. Los guardias intercambiaron miradas confusas.— Mi señora, Son Chaeyoung, ha venido desde muy lejos a ver al señor Akira Myoui.

El rostro de los guardias permanecio imperturbable antes sus palabras. Entonces una voz resonó tras ellos.

— Pierdes el tiempo.— Félix trató de buscar el rostro de aquella persona entre los hombres quién hablaba.— Ellos no entienden tu lengua, sólo  japonés.

Unas palabras en japonés provocaron que los guardias se movieron y dejarán a la vista al chico de cabellos negros, ojos rasgados y rostro delicado frente a él.

Sus miradas se encontraron con dureza y Félix no tardó en advertir el rastro peligroso que aquel sujeto le provocaba. Aún así, permaneció firme en su lugar, enfrentándose al hombre que avanzaba lentamente hacía él.

— Coreanos..— Pronunció en tailandés con asco.— ¿No están muy lejos de su.. pueblo?

El hombre de Chaeyoung no pasó por alto el disgusto que vibraba en su voz. Cambió su postura a una más dura y, sin romper el contacto visual, respondió con un tono mordaz:

— No seríamos los únicos ¿O si?.

Chaeyoung avanzó hasta ellos sin titubear y se dirigió directamente hacía el hombre:

— Soy Son Chaeyoung.— Se presentó.— Vine desde lejos para hablar con Akira Myoui, es de suma urgencia.

El sujeto arqueó una ceja con diversión mientras miraba a Chaeyoung y ladro una señal en japonés para sus hombres, quienes de inmediato avanzaron hacia los coches dónde los hombres de la coreana esperaban alertan.

Al momento de reaccionar, el sujeto volvió a hablar.

— Nadie se presenta ante Akira Myoui solo así, hasta que su encuentro culmine mis hombres vigilarán.

Luego volvió a dirigirse a otro hombre que aguardaba a sus espaldas y este corrió hasta adentrarse en la casa. Félix miró el rostro serio de Chaeyoung y agradeció que su líder fuera una persona decidida, tenía la sospecha que si mostraban un poco de debilidad ante aquellos sujetos, no lograrían salir de aquel pueblo en una pieza.

"LOST ON YOU" | JenLisa G!PWhere stories live. Discover now