chapter eight

100 11 0
                                    

—————————
痛み
—————————
Dolor

AZAMI CAMINABA POR LOS PASILLOS DE LA parte superior de la cafetería, arrastraba los pies y su mirada estaba en el suelo, tenía grandes ojeras y sus ojos se hallaban hinchados y rojizos, su nariz estaba irritada de tanto limpiarla y su humor estaba por los suelos.

Toda la noche se había lamentado una y otra vez la muerte de la madre de Hinami, se culpaba por todo y ese sentimiento de impotencia no la dejaba.

A unos metros se escuchó caer algo, claramente algún vaso o frasco de vidrio, aún así jamás levanto la vista, cuando estuvo a unos pasos escucho a dos personas en particular hablando.

Azami se puso del otro lado de la pared escuchando lo que ambos decían.

— No te preocupes por mí — hablo con quejido la pelimorada.

— ¿Te involucraste con las Palomas? — ella volteó su mirada a dónde se ubicaba la entrada a la habitación; encontrándose con su jefe.

— Touka fue herida — hablo el pelinegro con un toque de preocupación en su voz — necesita atención.

— No — contesto cortante el mayor.

— ¿Eh? — el pelinegro lo miraba incrédulo.

— Dije que no.

Ambos peleaban por ayudar a Touka o no.

— Si ella a tomado acciones contra las Palomas, significa que está dispuesta a aceptar toda la responsabilidad por si misma — miro a Kaneki — si vive o muere no le incumbe a nadie más.

— ¡No puede ser.....! — fue interrumpido por Touka la cuál salió corriendo de la habitación.

Azami dejo de escuchar la conversación de ambos y se alejo caminando, ella sabía que estaba siendo egoísta al pensar que al menos había otra persona que se sentía igual y le quitaba un ligero peso de encima, ella sabía que estaba mal pensar así, pero nadie podía juzgarla por sus pensamientos.

Menos cuando ella había pasado por lo mismo o eso se hacía creer.

Bajo a la planta de abajo donde Irimi la recibió con una sonrisa.

— Buenos días — saludo.

— Buenos días Azami.

La pelinegra noto desde la distancia el desánimo y la tristeza que desprendía la pelirosa, y sabía el porque todos en el lugar se hallaban de la misma manera; lamentando y sufriendo la partida de Ryoko.

— ¿Azami podrías sacar la basura? — la menor asintió y tomo aquella bolsa negra y camino hacia la parte trasera del local.

Cuando llegaba a esa parte podía escuchar las mismas voces anteriores y solo rodo los ojos.

No quería lidiar con ninguno de los dos.

— ¿Por qué fuiste sola? — pregunto el parchado.

— No importa si una asesina como yo muere — Azami detuvo sus pasos — Cuando un Ghoul como Ryoko o Hinami es asesinado sin ninguna preocupación, no puedo soportarlo.

Azami asomó su cabeza viendo a Touka dándole la espalda al azabache y el azabache dandole la espalda a Azami.

— Touka, No puedo matar a nadie, tampoco creo que la presencia de los investigadores este mal, tampoco creo que tengas la razón. — hizo una pausa — Pero cuando vi los últimos momentos de Ryoko tuve un fuerte presentimiento, si un humano o un Ghoul muere; si se trata de alguien que conozco me sería incapaz de soportarlo. Si tú fueras a morir, Touka, mi corazón se rompería.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 01, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

𝐋𝐈𝐀𝐑 ; Tokyo Ghoul (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora