Bienvenido a Nunca Jamás

Entonces, ¿vienes?

Félix, ya de pie, volteo y observó esos ojos por unos segundos.

  -No, no lo creo, el amor es algo lindo, tú eres más bien como un algo raro.- Dijo Félix con una sonrisa burlona en el rostro haciendo que el otro frunciera un poco el ceño.-  ¿Cómo te llamas?

  -Peter. ¿Tu?- Dijo alzando una ceja y ¡woow! Era casi hipnotizante.

Miro detenidamente a Peter, era alto, pero no más que él, se llevaban como media cabeza de altura, logro notar que sus orejas eran algo chistosas. Fue la única palabra que se le ocurrió para describirlas. Tenía unos ojos verde azulados simplemente bellos, no lo podía negar y unos labios algo finos de un tono rosa que a Félix casi le pareció gracioso en un chico.

Sonriendo de lado el mayor le extendió la mano.- Me llamo Félix, y yo si he de ser algo parecido al amor.- Concluyo con un tono burlesco.

El menor rodo los ojos con una sonrisa en el rostro. Félix le agradaba.

  -Como sea.- Contesto sentándose a un lado de la  farola recargando su espalda en esta. El otro imitando su acción recordó el extraño episodio por el que acababa de pasar, cerro sus ojos y suspiro.

Al poco rato los dos comenzaron a hablar de banalidades, se sentían cómodos con el otro. Casi como si se conocieran desde siempre.

  -Oye, tal vez no sea de mi incumbencia pero… ¿por qué saltaste? Supongo que sabes que una caída desde allí- Peter señalo con un dedo la ventana de la que salía la luz de una vela olvidada.- te pudo haber matado, ¿no?

Félix sintió como un nudo frío se alojaba en el fondo de su estómago. ¿Lo había visto? ¿Lo había visto saltar y después volar?

No. No podía ser. Simplemente que estuviera vivo era suerte y lo de volar lo alucinó. Y Peter únicamente vio ese golpe de suerte.

  -¿M-me viste? Quiero decir, ¿qué tanto viste?- Sentía a duras penas logro decir esas palabras sin atragantarse con ellas.

Se sentía inseguro, con miedo y ni siquiera sabía porque. Un total idiota y en verdad lo odiaba. Ya no más. Había dicho alguna vez junto a Amy y esas palabras aun le ardían en la garganta.

  -Sí, obvio que te vi, sino ¿quién más te habría salvado?- El más bajo soltó con tanta simplicidad que lo único que logro fue hacer sentir a Felix aún más confundido y aturdido de lo que ya estaba. Al ver la cara que puso el mayor siguió: - Ya sabes, ¿con polvillo de duende?-  Lo último había sonado más a pregunta que a afirmación  

  -Creo que me perdí. ¿Qué?

  Tú sabes, polvillo de duende. – Félix negó con la cabeza en señal de que seguía sin comprender. Peter soltó un suspiro y continuó:- ¿La cosa verde que obtienes de un árbol? ¿Eso verde que evito que tu cabeza se desparramara  por el suelo?

Félix se quedó callado y dudo un poco antes de contestar. - ¿No querrás decir polvillo de hadas? He leído sobre él en algunos cuen- Peter lo interrumpió escandalosamente.

  -¡No! El polvillo de hadas no es nada comparado al polvillo de duendes.- Casi grito moviendo exageradamente los brazos provocando que Félix riera, él lo miro y no pudo evitar echarse a reír con él.- No te rías, te hablo enserio.- Apenas pudo murmurar entre risas.

  -Si tú me salvaste con el polvillo de hadas a la quinta potencia, ¿Quién se supone que eres? ¿Peter Pan?- Se burló Félix.

  -Creo que a esta altura es algo obvio.- Contesto frunciendo un poco el ceño.- ¿No crees?

Félix rodo los ojos divertido. ¿Qué perdía con creerle? Probablemente solo era una alucinación.

  -Si no te creo, ¿qué harías?- La sonrisa que los dos pusieron simplemente no podía significar nada bueno.

  -Si no me crees tendría que convencerte.- Dijo completamente firme, como si lo estuviera retando.

  -Hazlo.

Peter alzo una ceja y se acercó un poco mirando hacia arriba por la diferencia de estatura. La mirada que se dedicaron solo se podría definir como intensa.

  -Bien. Pero tendrás que cerrar los ojos y confiar en mí, ¿de acuerdo, rubio?

  -Como sea, enano.- Sonrió burlón y cerró los ojos.

No era como si esperara que algo realmente ocurriera pero cuando sintió que algo le picaba la nariz una parte de él se emocionó como cuando era un niño y su hermana le leía aquellas increíbles historias.

Poco a poco sintió como sus pies se despegaban del suelo y el juraría que el corazón se le detuvo por un instante. Cuando abrió un poco los ojos recibió un manotazo por parte de Peter acompañado de un “No hagas trampa.” Seguido de un “Tranquilízate.” Que en definitiva no sirvió de mucho.

La mano de Peter sujeto con firmeza el brazo ajeno y en poco tiempo volvió a sentir que el viento le golpeaba la cara.

  -Si te doy permiso de abrir los ojos, júrame que no gritaras.- Escucho un Peter muy serio opacado por el sonido del aire. Lo único que logro hacer fue asentir, no se creía capaz de abrir la boca. –Bien, abre los ojos despacio y disfruta de la vista.- No lo vio pero estaba seguro de que Peter había sonreído.

Ignorando por completo a Peter abrió los ojos de golpe encontrándose con la vista área de un Londres que dormía, o en su mayoría lo hacía tomando en cuenta que eran cerca de las cuatro de la mañana de un domingo.

Sintiendo como todo lo que podría decir nacía y moría en su garganta en un solo momento lo único que logro decir fue un “¡Wow!” sin aliento que fue arrastrado por el viento, se dirigían directo al Big Ben.

Cuando los dos pares de pie tocaron un lugar firme a un contado del reloj Peter soltó su brazo y recordó que lo había estado sujetando. Se miraron a los ojos y comenzaron a reír sin razón. Tal vez por todo o por nada. Simplemente rieron hasta que el aire les hizo  falta y se tranquilizaron.

  -Así que, ¿Peter Pan?- Dijo Félix esbozando una gran sonrisa. Esto, todo, era genial.

Peter le devolvió la sonrisa y asintió.

  -Entonces, ¿vienes?

  -¿A dónde?- Respondió Felix un poco dudoso.

  -A Nunca Jamás, ¿A dónde más?

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Escribo mejor de noche UnU
Espero que les esté gustando mi historia, es el primer fic que escribo y todavía no estoy muy segura si va por un buen camino.

Perdón si no actualizo rápido pero les juro que hay días en los que podría pasar horas observando la pantalla y solo avanzar medio dialogo y otros en los que simplemente mis dedos parecen vomitar la historia sobre el teclado.

Si les gusto, voten y comenten, me hacen feliz.

Lxs amo UvU)r

 ×Saori00