— ¡Feliz cumpleaños, Alice! —Le digo. Mi hermana se ríe y agradece, feliz. Nos separamos e inmediatamente abraza a una sorprendida Jisoo, escondiendo su cara en el cabello de la ojiverde y envolviendo los brazos fuerte en su cintura.

— ¡Feliz cumpleaños! —Dice Jisoo con dulzura, recibiendo un chillido como respuesta, lo que la hace reír.

— ¡Estoy muy feliz de conocerte! —Dice Alice, separándose de Jisoo con una sonrisa.

— Es un gusto conocerte, Alice. Chaeyoung habla de ti todo el tiempo. —Dice Jisoo, tomándome de la cintura y acercándome a su cuerpo. Me sonrojo con el gesto sabiendo que mi hermana, y probablemente toda mi familia, nos están mirando y Alice sonríe dulcemente cuando ve que mi cara se ilumina con el beso que Jisoo me da en la cabeza.

Dejamos que mi hermana se quede con sus amigos y volvemos a reunirnos con mis padres que están hablando entre ellos, sonriendo por lo que sea que estén diciendo, lo que supongo que era sobre Jisoo y yo, pues se callaron tan pronto nos acercamos. Al menos estaban sonriendo. Nos quedamos un momento con ellos, los dos preguntándole a Jisoo cosas sobre las que ya saben las respuestas porque ya me habían hecho a mí el mismo cuestionario sobre su vida. Puedo decir que ambos la aman. Mi mamá siempre a alentado nuestra relación antes de si quiera conocer a Jisoo, hasta desde antes de hacerlo oficial. Mi padre ha sido un poco aprehensivo porque no la conocía, aún no lo hace apropiadamente, pero su interés por la vida de la mujer y su sonrisa cada vez que habla, me dicen que también la aprueba. Él sabe que estoy feliz.

— ¿Ma, podemos comer? —Pregunta Sohyun cuando Jisoo termina de responderle a mi papá algo sobre las ambiciones de su carrera: que espera cambiar los temas de su escritura hacia algo más importante para ella, quizá unirse a una compañía más grande para lograrlo, lo que en consecuencia hace más feliz a mi papá con ella. Jisoo mira hacia las mesas con comida en el jardín y asiente en respuesta a nuestra hija.

— ¿Alguien quiere algo? —Pregunta Jisoo amablemente, tomando la mano de nuestra hija. Los tres decimos que no y ella me besa suavemente, sonrojándose inmediatamente al reconocer que aún estamos frente a mis padres—. Volveremos pronto. —Dice, con su cara todavía muy roja, y se va con nuestra hija en busca de comida. La miro alejarse, caminando con sus apretados pantalones marrones, camisa y botas negras de tacón que usó para mantener una pequeña diferencia de tamaño entre las dos después de mi persistencia a usar mis tacones. Sohyun a su lado con un vestido similar al mío, el de ella con un diseño floral rosado y el mío blanco simple.

— Ella sin duda es un buen partido, hija. —Halaga mi padre. Ambos sonríen ante la evidencia de mi propia felicidad.

— Lo sé. —Digo, riendo un poco.

Los tres miramos a Jisoo alzar a la pequeña sobre su cadera para que pueda alcanzar la mesa, sosteniendo un plato para Sohyun con la otra mano. Dejo a mis padres y me uno a mi propia pequeña familia en la mesa donde Jisoo ya está organizando un plato para las dos, sabiendo aún primero que yo que yo también iba a querer comida. Hablamos con mi hermana un momento cuando también se sienta a comer, y como con mis padres, Jisoo se la gana fácilmente con su carisma y encanto; mi hermana casi desmayándose ante casa cosa que dice. Me río para mí misma por su agrado por mi novia, sabiendo que es imposible que ella no le guste a alguien.

No duramos mucho comiendo y al terminar Sohyun sale corriendo a saludar a familiares que probablemente no recuerda y a jugar con un perro que no sabía que mis padres tenían.

— ¿Estoy siendo paranoica o todos me están mirando? —Pregunta Jisoo al volver afuera luego de ir por bebidas a la cocina. Solo fuimos por unas bebidas, pero unas tías nos detuvieron dentro, todas desesperadas por conocer a Jisoo y hacer cada posible pregunta como si mis padres no hubieran hecho lo mismo ya. Pero ella no está siendo paranoica, la gente sí está mirando.

the donor » chaesooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora