The Groom || Eddie Gluskin || Remake 2023

¿Amor?

¿Haz besado a alguien por besarlo? es decir, que esta persona no te atraiga en lo más mínimo. Bueno, eso significó para mí el beso de Eddie, no puedo negar que sentía ciertos sentimientos por él hacia mí, pero por mi parte: fue un beso vacío.

Eddie rebuscó en los bolsillos de su pantalón, sacando un anillo, seguramente lo había robado de alguno de los doctores que llevaban argollas de compromiso. Sin decir palabra alguna, lo puso sobre mi dedo, seguramente de quién lo haya robado tenía un buen gusto, seguramente su prometida estaría maravillada, el anillo tenía pinta de ser de oro, y en el centro tenía un cristal azul.

— Es muy bonito, gracias Eddie. – musité.

— Trabajé duro para poder comprarlo.

Era mentira, pero tendría que dejarlo vivir su fantasía.

— ¿Sabes? creo que debería dormir, todavía me siento cansada. – y no era mentira, debía hacer un plan para regrese a casa, con o sin Eddie.

Mi ahora prometido no se veía contento con mi petición para dormir, pero al final de cuentas lo aceptó.

— Está bien.

Se levantó dejándome la cama sola, él abandonó la habitación, parecía que tenía cosas por hacer. Al cerrar la puerta pude apreciar el sonido de Eddie arrastrando algún objeto para evitar que pudiera escapar mientras él no estaba. En fin, me recosté tratando de dormir.

( . . . )

Desperté sola en el cuarto, esperaba que todo fuera un mal sueño, pero he aquí de nuevo en mi cruel realidad. Me levanté de la cama, y me detuve un momento para ver mis manos, tendría que cambiar el vendaje de mi mano, y de alguna forma tomar un baño: no soportaba la suciedad de mi cuerpo.

Tomé el botiquín de dónde lo había dejado Eddie, comencé a atender mi herida, en unos días debería estar sanada.

Nuevamente me levanté pretendiendo salir de esta habitación, por sorpresa no había nada que impidiera que se abriera. Antes de irme, tomé un tubo de fierro que había por ahí tirado, cerré la puerta y caminé a la izquierda, tenía una pequeña noción de dónde estaba, me daba miedo encontrarme a alguien, aunque esto sería algo imposible puesto a qué esta zona le pertenece "al novio".

Encontré un baño, entré a este cerrando la puerta para que nadie entrara, me quité cada prenda de vestir que llevaba puesto, a excepción de los tenis, me daba mucho asco el que mis pies tocaran el piso. Abrí el grifo, y con una mano trataba de mojar cada parte de mi cuerpo intentando sacar la suciedad que tenía, aunque no sería tan efectivo, quería dejar de sentirme sucia.
Había espejos en el baño, pero no me atrevía a siquiera mirarlo, sabía que mi rostro había cambiado, al menos mi semblante, de igual forma, mi cuerpo se sentía diferente: más delgado a causa del ejercicio extremo por tratar de escapar, la falta de comida y de sueño. Quizás, esto era algo asqueroso, pero tomé un poco de agua del grifo con la mano, comenzaba a entrar en deshidratación.

— ¿Ya lo habrá conseguido Waylon?

Terminé mi ducha exprés, volví a colocarme mi ropa. Salí del baño, decidida a buscar a Eddie.

Sin más por menos llegue a el elevador, seguí hasta volver a ver el vestido con el cual no hace mucho conocí a mi prometido. De pronto, una mano me hizo el cabello detrás de la oreja, era un gesto que me encantaba, lograba erizar mi piel.

— ¿Eddie? – pregunté entre una sonrisa.

— Podría ser.

Esa voz no era la de Eddie, extrañada y a punto de entrar en pánico me giré visualizando a Jeremy.