Extraños Conocidos.

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Shingeki no Kyojin es propiedad de Hajime Isayama.

Rating: M, Kinks.

Pairing: Eren x Mikasa

La jueza de restaurantes, Mikasa Ackerman, se encuentra con el dueño y chef principal de un restaurante con un sabor muy especial.

Canción: Entre Caníbales – Soda Stereo

(https://www.youtube.com/watch?v=yb0cO3ljTVM)

Una eternidad
Esperé este instante

Las luces nocturnas de la ciudad entraban por su retina sin piedad y ella fruncía el ceño cada vez que le tocaba forzar su vista para buscar el restaurante donde tenía que llegar en menos de 10 minutos. Maldijo por lo bajo, porque su celular se apagó dejándola sin poderse ubicar en el GPS. No sabe si fue un toque de suerte o  que pero logró ver el letrero del restaurante entre tantos letreros fulgurantes de restaurantes de alto prestigio. Cruzó la calle para llegar a una sencilla entrada, mucho más sencilla que la de los otros. Le parecía extraño que fuera tan modesto ya que los precios en la carta que le habían enviado eran bastante exorbitantes.

Llevaba cerca de 10 años degustando y dando calificaciones para ubicar el prestigio de los restaurantes y si estos valían sus precios. Y ella se encontraba muy orgullosa de ser una de los selectos degustadores que podían otorgar estrellas Michelin, y este establecimiento buscaba la segunda, por lo que se le hacía en demasía extraño que fuera tan modesto en aspecto.

Al entrar, una chica de cabello marrón le sonreía. Llevaba un traje de mesera con pantalón azul, blusa de color completamente blanco y un mandil de color azul marino.

-¡Muy buenas noches!, soy Gabi y es un gusto atenderle. ¿Ya ha hecho reservación con antelación?

-Buenas noches. Um, sí. – Buscó en su bolso su tarjeta de presentación y se la enseñó. – Soy Mikasa Ackerman, vengo por un asunto de degustación.

-¡Oh, claro!, acompáñeme por aquí. – La chica comenzó a caminar por un largo pasillo y entraron en un salón separado en pequeñas salas para hacerlo más cómodo y privado. La mesera entró a la sala más cercana a la cocina, le ofreció sentarse en la mesa para dos personas y dejó la carta en la mesa. – En un momento vendrán a atenderle, que tenga una deliciosa cena.

-Gracias.

Esperó poco más de 5 minutos. Comenzaba a desesperarse por la insensata tardanza del chef. Aunque tomó en cuenta que ella llegó 1 minuto después de la hora acordada. Finalmente, frente a ella se acercó un hombre de piel morena y ojos verdes penetrantes.

-¿Señorita Ackerman? – Ella asintió. – Lamento la tardanza profundamente, déjeme servirle lo que usted desee. Soy Eren Jaeger, el chef principal y dueño del restaurante.

-Señor Jaeger, gracias. – Ella cerró la carta y se dedicó a cruzar los brazos sobre su pecho. – Aunque tendré que tomar en cuenta la tardanza.

-Lo lamento, señorita Ackerman.

-Pediré un guiso de res.- Los ojos brillantes del hombre se posaron intensos sobre los propios. – Y un vino tinto, gracias. Ojala no tarden tanto, señor Jaeger.

-Por supuesto que no, señorita. – Él le sonrío burlón y continuó. – Le encantará tanto que querrá probar mí…

-¿Su? – Ella levantó la ceja curiosa y molesta por la arrogancia explosiva del hombre.

-Olvide ese comentario por favor. – El hombre hizo una leve reverencia. – Para asegurar su satisfactoria estancia, cenaré con usted. Si no le molesta.

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