El otro - Itadori x Lectora x Sukuna (Yandere)

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Dia 16

Sentiste cierto pánico cuando despertaste y no viste a ninguno de los hermanos a tu lado, y no podías moverte, tampoco gritar.

Cuando quisiste mover tus manos, estas estaban atadas a los extremos de la cama, al igual que tus pies, y en tu boca tenías una mordaza.

Miraste a todos lados sumamente nerviosa a lo que estaba ocurriendo, tu corazón latiendo con miedo.

-"Estas asustada?" Yuji dijo apareciendo en tu campo de visión, lo miraste suplicando que te ayude "Lo siento... Fue idea de Sukuna... No puedo..." dijo mirando a un lado apenado "Pero no tengas miedo! No te haremos nada malo! Es algo bueno!" sonrió

Eso no te relajaba para nada.

-"Oh ya despertó" Sukuna dijo entrando al cuarto "Vamos a tener que atrasar el desayuno" miró a su hermano "Listo?"

-"Si!" Yuji dijo y te miró "Lo siento pero te sentirás bien, si?" te dijo con mucha ternura mientras colocaba sus manos en tus ropas para romperlas y dejarte al descubierto

Más miedo sentiste en ese instante, le negabas con tu cabeza pero él sólo ye dio una sonrisa y acarició tu cabello.

-"Tranquila! No te haremos daño" besó tu mejilla queriendo que te calmes

-"Su respiración está agitada, realmente está muy asustada" Sukuna dijo subiendose a la cama y colocando su mano en tu pecho sintiendo como este subía y bajaba rápidamente por tu respiración

Empezaste a sentir como depositaban pequeños besos en todo tu cuerpo, algunos generandote escalofríos a veces.

De cierta forma, agradecias que no hayan destrozado tu ropa interior, dejando está intacta.

Y sus pequeños besos no eran sobrepasados, parecían sólo querer darte cariño, sus suaves y cuidadosos besos estaban llenos de dulzura, y nada de maldad.

Te sujetaban con cuidado cuando besaban tus muñecas y pies, preocupados por las pequeñas marcas que te habias hecho por el forcejeo de antes.

Luego de un rato acabaron y te desataron sin problema alguno.

-"Vamos a desayunar, yo preparé todo abajo, se enfriara demasiado si lo dejamos mucho más" Sukuna mencionó levantandose tranquilo para irse sin más

-"Yuji... Yuji..." lo llamaste antes de que se fuera "Por qué... Por qué hicieron eso?"

-"Sukuna dijo que los besos a la mañana ayudan a empezar mejor el día y demostrar a la persona que quieres que la amas mucho!" Respondió en una inocente sonrisa

No estabas segura de que si lo que decía era cierto, pero no se veía que tuviera malas intenciones, así que decidiste creerle.

Qué debías hacer?

No te parecía que iba a ser la última vez que iban a ocurrir situaciones de este tipo...