El otro - Itadori x Lectora x Sukuna (Yandere)

6

Día 4

Te despertaste aquella mañana con golpes en la puerta de tu cuarto.

-"(T/n)... Por qué cerraste tu puerta?"

Escuchaste la voz de Itadori del otro lado.

No contestaste, te mantuviste en silencio queriendo ver que ocurriría.

Empezó a golpear la puerta con más fuerza.

-"Por qué no respondes?..."

-"Yuji... En un momento voy a salir, si?..." decidiste hablar ahora, algo asustada por su actitud

Pero volviste a escuchar que empezó a golpear la puerta con desesperación.

-"Por qué? Por qué? Por qué? Por qué? Por qué?!" preguntaba contasntemente mientras seguía golpeando la puerta y quería abrirla a toda costa

En este punto, ya hasta tenías miedo de que fuese a romperla.

-"Por qué tienes miedo de mi?"

Esto último realmente te aterró, juraste que lo habías oído dentro de tu habitación.

Escuchaste un golpe fuera del cuarto, como si algo pesado hubiese caído.

En eso te levantaste y fuiste a abrir la puerta, encontrandote a Itadori tirado en el suelo, abrazando sus piernas, temblando y sollozando.

-"Tu también me odias... Tu también..." decía entre sollozos

-"No- no, no, no digas eso, claro que no te odio- yo-" dijiste mientras te arrodillaste a su lado queriendo consolarlo

Pero al momento en que lo tocaste él se hizo a un lado.

-"Mentirosa! Por qué cerraste la puerta entonces?... Hice algo mal?..." dijo aún sollozando

-"No, no hiciste nada mal- sólo- cerré la puerta porque me asusté, escuché un ruido extraño y me asusté- eso es todo..." intentaste convencerlo con eso

-"Oh... Pero no hay nada de que temer aquí..." dijo sujetando sus rodillas mientras se sentaba contra la pared y te miraba, aún con aquella máscara puesta "Así que... No lo vuelvas a hacer, por favor, si?" ladeo un poco la cabeza cuando dijo esto

-"Okay... Okay... No lo volveré a hacer... Lo siento" dijiste suave

Él te quedó mirando un momento, para luego acercarse a gatas a ti para abrazarte con fuerza. Colocando su rostro en tu hombro.

Escuchaste lo que parecían sollozos de su parte aún, y acariciaste su espalda a manera de consuelo.

Lo que no sabías, era que estos sollozos, sólo eran respiraciones que querían adquirir tu olor lo mejor posible.

El día comenzó bastante agitado, con este reciente suceso, y no continuó mucho mejor.

Te sentías incómoda estando al rededor de Itadori, y él, hoy más que otros días, estaba muy pendiente de ti.

-"Por qué me tienes tanto miedo?" preguntó detrás de ti

Te diste la vuelta algo alterada viendolo y él sujetó tu muñeca y evitó que te pudieras ir.

-"No huyas... Por favor..." soltó suavemente tu muñeca, viendo la suave marca que te había dejado

Se sintió mal por haberte hecho daño, y llevó tu muñeca hasta los labios de porcelana de su máscara, simulando darle un beso.

-"Me voy a portar bien... Lo prometo..." dijo poniendo tu mano en su frente

Suspiraste mientras lo mirabas, realmente parecía sentirse culpable de lo que había hecho, y quería tu perdón.

-"Okay, okay, te creo, si?" le dijiste acariciando su cabello

Eso lo animo muchisimo, enseguida se lanzó hacia ti para darte un abrazo.

-"Muchas gracias...." susurro en tu oido

Luego de pasar la mayoría del día, con bastante incomodidad, poco a poco te sentiste más relajada.

Parecía un niño que hizo una travesura, y que se arrepintió de la misma.

Estabas casi segura de que no volvería a hacer esas acciones cometidas.

Al menos eso pensabas.