Prólogo

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“Deja que el agua suba, deja que el suelo se agriete, déjame caer dentro, acuéstate sobre mi espalda y dime que todo estará bien, te lo pido.”


Sus ojos dolían, no aguantaba más con la presión que tenía encima, sus nudillos lastimados por el mismo y es que no tenía autocontrol del daño que se causaba. Respiro hondo una vez más, repitiendo en su cabeza uno, dos, tres veces los ejercicios de respiración que guardaba en una pequeña carpeta, sus ojos nublados, mirando fijo a la pantalla de la computadora y lloró, no pudiendo controlar el llanto que le calcomanía y es que lo extrañaba, extrañaba esa sensación de recibir un mensaje suyo diciéndole que todo estará bien, pero él ya no estaba

arrepintiéndose de la decisión que tomo, pero no podía hacer nada, ya no...

JUST A MOMENT - KTH&&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora