"Vecinos" ; xcry

14°

Día de fiesta, sabadrink como le dice Pipe, hoy es el día en el cual veremos quién ganará la apuesta.

Y todos tenemos ansias de que gane Sasha.

— Chico, me puedes pasar el cable por favor — Cry le pasó lo pedido al Sr. Marcos.

El se encuentra en la casa de Eleanor ya que el Sr. Marcos no sabe como formatear su computadora y bueno ahí entra Cry.

— Simplemente tiene que hacer esto — El chico le muestra cosas al señor quien este está maravillado con todo.

— Para eso sirve este botón — Cry asiente por lo que el señor cambia su expresión a una asombrada — De verdad que estoy muy agradecido con usted.

— No es nada Sr. Marcos, cuando tenga algún problema me dice — El señor sonríe con aprobación.

— Quiere tomar agua o algo — El chico asiente y suelta un pequeño "por favor" — Eleanor.

— Diga — la chica sale de la cocina mirando a su padre.

— El chico quiere agua, le puedes traer — La chica lo miro frunciendo el ceño.

— Solo agua — pregunta ella con algo de disgusto — Quieres una monster — el chico abrió los ojos asombrado mientras el señor lo mira raro.

Creo que ha visto mucho mis streams, dijo su subconsciente dudoso.

El chico solo le mostró una leve sonrisa y asintió.

— Allá voy — ella entró quedando solo con el señor.

— A ti te gustan las bebidas esas raras — la pregunta del Sr. Marcos hizo indignar un poco al chico.

No son bebidas raras, son MUNDIALES.

— Si, a mi me encantan — soltó con un tono de voz algo tranquilo.

Luego de cinco minutos la chica salió con una Monster Blanca.

Muero, se dijo el al ver cómo  le traen una de sus grandes adicciones.

— Gracias — La miró a los ojos sacándole una sonrisa a Eleanor.

— De nada — Se volteó para ir a la cocina mientras que el señor mira a los dos frunciendo el ceño.

— Usted conoce a mi hija — El chico casi se atraganta con el líquido.

— Emm... Si Sr. Marcos — Dijo nervioso, el señor se cruza de brazos.

— Desde cuando — preguntó este.

¿Me puedo ir?

— Hace no mucho — Dijo dudoso el mientras el señor se lo come con la mirada.

— Interesante — Cambio su expresión a un intento de amigable.

Para el Sr. Marcos, aunque no lo parezca, su hija es como un diamante que no quiere soltar, es alguien fundamental en su vida, el no acepta que Eleanor haya crecido a pesar de que tenga dieciocho años, no quiere alejarse de ella en ningún momento y tampoco quiere que un chico la aleje de su familia.

Pero tendrá que aceptarlo.

— Quieres quedarte a almorzar — después de un silencio incómodo el Señor habla dejando al chico asombrado.

— No se preocupe, yo estoy bien — Le dice queriendo irse de ahí.

— Insisto, quédate, mi esposa hace la mejor carne del mundo — dijo con una sonrisa causando algo de miedo al chico.