–¡Que bueno que te gustaron! – dijo Ethan.

–Las escogimos especialmente para ti. – dijo Evan.

Me dieron las rosas, se las pasé a Adam para que las sostuviera y rodeé a los pequeños con mis brazos, deposité varios besos en sus mejillas haciéndolos reír, cuando terminé de darles besos, los abracé y ellos correspondieron a mi abrazo, nos separamos y tomé las rosas, ellos corrieron nuevamente a seguir jugando.

–Voy a aceptar que robaron mi encanto. – me reí.

–No hay nada que hacer. – nos quedamos en silencio – Adam ¿puedo preguntarte algo?

–Claro.

–Los niños me dijeron que su mamá murió cuando nacieron.

–Así es, nunca se las menciono porque ella no los quería y no quiero que sufran al enterarse. – dijo un poco incómodo.

–Lo siento, no quería incomodarte.

–No te preocupes, su mamá y yo no teníamos una relación, simplemente era llamarnos cuando era necesario, ella quedó embarazada, yo siempre quise tenerlos, pero ella decía que no, que le deformaría el cuerpo y se pondría gorda, entonces la convencí de tenerlos, ella accedió, pero empezaron las cosas mal, si me veía con una mujer se ponía celosa y posesiva, nosotros no éramos nada, no tenía porque estar así, si teníamos en claro que era lo que teníamos, me amenazó con abortar si no vivíamos juntos, accedí a vivir juntos, las cosas se ponían peor, era un completo dolor de cabeza pero tenía que soportarlo por los niños, causó que el parto se adelantara, tenía siete meses de embarazo, los niños estaban pequeños, aún no se habían desarrollado bien, puso en riesgo sus vidas, me enteré por una vecina que la vió, salvaron a los bebés pero ella no soportó y murió.

–Pobres peques.

–Sí.

–Pero tienen un gran padre que los quiere mucho y siempre ha velado por ellos y por su seguridad.

–Gracias.

–No tienes que agradecer cuando te dicen la verdad. – sonrió.

–Se ve que te gustan mucho los niños.

–Sí, siempre quise tener hermanos menores pero desde que mi madre engañó a papá y se separaron, ella continuó su vida pero nunca tuvo hijos y papá no tuvo el suficiente tiempo para encontrar a una buena mujer, yo vivía con papá pero cuando murió, tuve que regresar con mi madre porque no tenía opción y viví con ella y su pareja durante varios años, hasta que pude salir de ahí.

–Lo siento.

–Está bien, es mejor así, ahora veo que fue mejor no tener hermanos, así no tuvieron que sufrir.

–Yo tampoco tuve hermanos, mi mamá tuvo varios abortos, hasta que me tuvieron a mí, dicen que fue complicado, pero lograron cumplir su sueño de ser padres y después decidieron solo quedarse conmigo, Simon pasaba seguido en casa, así que era como otro hijo para ellos.

–Simon y tú ¿se conocen desde mucho tiempo atrás?

–Sí, desde que teníamos siete.

–Wow, demasiado tiempo.

–Sí.

–Yo no tenía muchas amigas, bueno en si no tenía.

–¿Por qué?

–Se burlaban todos de mí.

–¿Por qué?

–Porque siempre fui penosa y por cualquier cosa me ponía roja como un jitomate.

MIS PEQUEÑOS FAVORITOSWhere stories live. Discover now