¡No te atrevas a tocar mi hobbit! [TERMINADA]

Capítulo 3

Cuando Thorin volvió a su mente, su primera preocupación fue el Hobbit. ¿Cómo se puso tan bien este pequeño ladrón en la lucha? Simplemente estaba estupefacto ante su habilidad. Para un principiante fue bastante sorprendente. Tenía que admitir eso. Aún estaba enojado. Incluso con su habilidad, Azog no era alguien con quien meterse y, maldita sea, Bilbo se había metido con él. Thorin tuvo que admitir que estaba bastante sorprendido de que los ladrones se movieran.

Deslizándose justo debajo de Azog y golpeándolo en las joyas, ¡ni siquiera el propio Thorin lo habría hecho!
Cuando Kili y Fili lo ayudaron a levantarse, con una sonrisa de felicidad en sus rostros, lo primero que vio Thorin fue el Hobbit, cómo estaba parado allí cerca del borde y parecía tan perdido y preocupado. No como el valiente luchador que se enfrentó a Azog para salvarlo.

Cuando Thorin finalmente abrazó al Hobbit con total agradecimiento, se sintió tan bien. No quería soltarse tan rápido, porque Kili y Fili tenían razón y el Hobbit realmente era muy suave, pero quería asegurarse de que Bilbo no estuviera herido. Bilbo salió ileso, pero eso fue solo suerte. Lo abrazó de nuevo y suspiró suavemente. No podía dejarlo ir ahora.

Pudo escuchar a Fili y Kili reírse y soltar a Bilbo. Pero no dejó de sonreír.
"¿Cómo es que eres tan hábil con tu espada?" Preguntó Thorin. Bilbo solo sonrió y se encogió de hombros.
"¡Secreto!" Dijo y se dio la vuelta. Thorin también miró el horizonte. La montaña solitaria era una pequeña silueta contra el cielo.

"Sugiero que nos quedemos aquí y descansemos. Fili, Kili, traigan un poco de leña, Bombur preparen un almuerzo con cualquier comestible que encuentren. Ori, Nori, ¡tal vez encuentren algo de carne para nuestra comida!" Thorin dijo e instruyó a todos menos a Bilbo.

"¿Qué debo hacer?" Bilbo preguntó suavemente, todavía sonriendo. Thorin se sonrojó y murmuró: "Tal vez puedas poner un ungüento en mis heridas y envolverlas. Bofur tiene algunas cosas para eso".

Bilbo entendió y no dijo nada más. Se dio cuenta de que era difícil para Thorin pedir ayuda, pero también le demostró que confiaba en él. Bilbo se alegró. No podía dejar de sonreír, y seguía sonriendo cuando regresó a Thorin, con algunos envoltorios y ungüentos.

"¿Y estás seguro de que no estás herido?" Thorin preguntó y dejó que su mirada vagara por el cuerpo de Bilbo. Bilbo sintió algo de calor en sus mejillas cuando negó con la cabeza.

"¿Necesitas ayuda para quitarte la ropa?" Bilbo preguntó y en el segundo en que las palabras salieron de su boca sintió que el calor crecía. Claramente ambiguo. La punta de sus orejas estaba roja y caliente, pero su mirada era firme. Pudo ver un poco de rubor en las mejillas de Thorin, pero tan pronto como llegó, desapareció y Thorin dijo: "Podría necesitar un poco de ayuda".

Cuando Bilbo ayudó a Thorin a quitarse la ropa, tuvo que luchar contra el impulso de vagar con las manos sobre el cuerpo del rey.

Maldita sea, ¿por qué es una criatura tan majestuosa? Bilbo se preguntó a sí mismo mientras desnudaba a Thorin un poco más rápido. Tenía que darse prisa. Su control ya estaba roto, no se necesitaría mucho más para romperlo.

Cuando miró las heridas de Thorin, respiró hondo. Sacó un pañuelo limpio y lo mojó en agua.

"Arderá un poco, pero si te quedas quieto, pronto se desvanecerá". Bilbo instruyó y se arremangó. Thorin asintió y apretó los dientes cuando el pañuelo entró en contacto con sus heridas.