Mute ○ HopeV.

○ O7O.

Al entrar al lugar, YoonGi vio la cabellera mojada de JiMin desde la puerta y se detuvo un segundo en el umbral.

Los brillantes y adorables ojitos de JiMin lo miraron un momento, YoonGi comenzó a sentir su corazón latir más rápido.

Sus miradas se encontraron por un segundo, aunque el menor fue quien apartó la vista primero. YoonGi pensó en huir, pero le había dicho a HoSeok que se quedaría allí, así que corrió la puerta a su espalda para cerrarla, dejando la toalla a un lado, un poco alejado de los bordes y dudó un momento en meterse o no.

Miró a JiMin, quien le estaba dando la espalda flotando cómodamente en la parte más profunda, suspiró por lo bajo antes de sentarse, dejando sus piernas dentro del agua.

— ¿No estabas con TaeHyung? —le preguntó solo para cortar la tensión.

— Fue al baño.

Asintió, por más que el chico no lo vio— HoSeok estaba en el baño, así que tardaran un rato —no le respondió.

Tuvo más ganas de irse, aunque esperó unos segundos para levantarse, acercándose a la puerta. JiMin se dio cuenta de aquello, aunque no lo demostró, se sentía mal.

YoonGi tomó la manija de la puerta, pero apenas pudo abrirla unos centímetros cuando está volvió a cerrarse de golpe. Intentó abrirle de nuevo, pero la fuerza de otra persona no lo dejaba.

— ¡No se van hasta que se arreglen!

— ¿HoSeok? ¡deja de incluirnos siempre en tus planes!

— Deja de caer siempre en ellos —contraatacó.

— ¡Mierda! ¿¡cuánta fuerza tienes!? —se quejó mientras seguía intentando.

— Es un dos contra uno, bobo.

— ¿Dos?

— TaeHyung —afirmó JiMin desde el agua.

YoonGi soltó la puerta con brusquedad, ha cansado de todo esto, si ese era un impulso por parte de sus amigos para arreglar las cosas, sentía que no estaba listo. Le miró un momento, juntó valentía antes de voltearse y volver a caminar hacia la piscina, con rapidez y decisión.

Siempre, en lo que respectaba a JiMin se sentía nervioso, muy inquieto y le había costado bastante para que se acostumbrara a los besos o mimos cuando estaban a solas, pero en temas serios, importantes de la relación (incluso en el momento de confesarse) simplemente no sabía cómo reaccionar. Sintió sus manos temblar, se metió en la piscina, pero el agua pareció llevarse toda su determinación y se congeló ante la mirada de JiMin.

— No hables conmigo si HoSeok te está obligando, no tienes que hablarme si no quieres —quiso disimular con una tos cuando su voz se quebró al final, pero no pudo.

Se mordió el labio, sentía su corazón doler— No, HoSeok está ayudando, yo le pedí ayuda —hablo, captando la mirada de JiMin— porque soy muy inseguro para hablar y tengo miedo de perderte si vuelvo a arruinarlo... —miró directamente a sus ojos antes de continuar— no debí dejar así el otro día, estuve mal, fui horrible —el menor esperaba cada palabra— en verdad me gustaría que tuvieras tanta fe en ti mismo, en el tratamiento y en volver a caminar como yo tengo... porque sé que puedes lograrlo —los ojos de JiMin se llenaron de lágrimas— pero es tu decisión y es algo que entendí muy tarde —continuó, acercándose al menor— te grite y te dije las cosas mal porque... no sabía escucharte y tampoco apoyarte, no digo que sea un experto ahora, pero... dime por favor... ¿porque no quieres seguir?

JiMin se mordía el labio nervioso, un hipido de llanto escapó de ellos, YoonGi inconscientemente se acercó más a él, colocando su mano en la cintura del otro.

— Tengo miedo —confesó— miedo de decepcionarme, ¿y qué si no funciona? ¿y si sigo en la silla de ruedas toda mi vida porque ese tratamiento, ese esfuerzo, todo... fue en vano?

YoonGi se sintió aún peor, tiro de ambos hasta la parte más baja, lo suficiente para que pudiera abrazar a JiMin con todas sus fuerzas, dejando que llorara, sin poder evitarlo algunas lágrimas se le escaparon también.

— Ante cualquier cosa que decidas te acompañaré —prometió YoonGi— si no quieres seguirlo, seguiré a tu lado, si quieres... voy a estar ahí para pelear contra tus miedos, yo creo que lo lograrás y aunque no sea así... seguiré a tu lado igual, te querré igual, todo seguirá bien.

JiMin calmó un poco su llanto con esas palabras, se apartó un poco del abrazo para mirarlo, el agua llegaba hasta sus hombros, así que podía permanecer de pie delante de su chico mirándolo frente a frente. Encontró que se sentía muy bien y sonrió, no sabía lo tanto que necesitaba escuchar un apoyo como ese.

— ¿Me perdonas? —preguntó YoonGi.

Asintió, tomando las mejillas del mayor para besarlo con lentitud.