Somos tan distintos así como la luna y el sol, como la rosa y el girasol; pero cuando estamos justos nos complementos así como el dolor y el paracetamol.
Somos polos opuestos, por lo tanto, nos gustamos, así como dos imanes que se unen, así mismo nos atraemos recíprocamente, por ende nos amamos.
Somos como la unión de unas rimas y unos versos que conforman una canción.
Somos distintos y esté tipo de atracción se encuentra en vía de extinción.
Eres extrovertida y yo introvertido, te gusta fiesta; a mí también, pero sólo si es contigo.
Te gusta bailar; a mí me gusta pintar, te gusta platicar; y a mí gusta redactar, así somos tu y yo (diferentes), pero a medida que pasa el tiempo nuestro amor se hace más fuerte.
