𝐈𝐍𝐕𝐈𝐒𝐈𝐁𝐋𝐄, fred weasley

𝖮22

Fred le sonrió a Ruth y ella le devolvió la sonrisa. No se pronunció ninguna palabra durante unos segundos; A Ruth no le agradaba demasiado el silencio.

Afortunadamente, Katrina y Poppy llegaron antes de que un incómodo silencio pudiera asentarse alrededor de los cuatro Gryffindors. Las hermanas Ash observaron al inusual grupo durante unos segundos, antes de unirse a ellas.

—Nuestro primer partido se acerca—anunció Poppy al grupo.
—¿Es contra Ravenclaw?.

—Hufflepuff—corrigió George.
—Deberíamos ganar, si Ron empieza jugar bien.

—¿Por qué no juegas Quidditch, Ruth?— Preguntó Fred, haciendo que la conversación se volviera hacia ella. Sintiendo los ojos de todos sobre ella, Ruth se encogió de hombros.

—No soy buena en eso, supongo.

—Eso es mentira—intervino Poppy
—Puedes jugar.

—Nunca en mi vida he jugado un partido de quidditch—le informó Ruth a su hermana.

—Solías volar en la vieja escoba de papá todo el tiempo, y eras bastante bueno en eso—dijo Katrina.

—Oh Merlín, ¿recuerdas el verano anterior al primer año?—Poppy exclamó y Katrina soltó una carcajada.

—¿Qué pasó durante el verano antes del primer año?—Fred se rió entre dientes.

Las risitas de Katrina fueron silenciadas mientras escondía su rostro entre sus manos. Poppy se rió de la reacción de sus hermanas antes de volverse hacia el grupo. —Las tres estábamos en el jardín, pasándonos una quaffle. Katrina lanzó con especial fuerza y ​​Ruth retrocedió para intentar atraparla y ... y ...

Poppy hizo una pausa para soltar algunas risitas. Katrina tenía la cara roja, pero levantó los brazos en el aire, como para hacer su propio anuncio.
—Lo tiré tan lejos y con tanta fuerza que cuando Ruth lo atrapó, ¡atravesó la ventana del dormitorio de nuestros padres!

Una risa ligera llenó el grupo, extrañando a Ruth porque se sentía demasiado avergonzada.

—Pero entonces—Poppy continuó dramáticamente.
—La fuerza de la quaffle fue tan grande que obligó a Ruth a atravesar la puerta del dormitorio y se cayó por las escaleras, ¡todavía en su escoba!

—¡Y!—Katrina estalló antes de que pudiera seguir riendo.
—Llevaba la túnica de la vieja escuela de nuestra madre, que eran millas demasiado grandes. De alguna manera, se le escaparon y Ruth estaba sentada completamente desnuda al pie de la escalera.

Ese detalle los hizo reir a Fred y George, quienes no pudieron evitar estallar en carcajadas por el vergonzoso incidente de Ruth. Fred hizo contacto visual con Ruth, lo que lo hizo reír aún más por alguna razón.

—¡No estaba completamente desnuda!—Exclamó Ruth.

—¡Básicamente lo estabas!—Katrina argumentó a través de su risa.

Ruth podía sentir que Casper se ponía tenso a su lado y en silencio le rogó que no la defendiera, aunque no estaba muy segura del por qué.

—¿Entonces por eso no juegas quidditch?— Preguntó Fred, secándose los ojos.
—¿Tienes miedo de atravesar una ventana de Hogwarts y terminar desnuda?.

Más risas estallaron y Ruth se encontró uniéndose a ellos.
—No—se rió Ruth.
—Simplemente nunca me metí en eso. Nunca tuve entrenamiento.

—Te entrenaré—sugirió Fred.

Ruth no tuvo la oportunidad de responder, ya que Katrina había interrumpido.
—Enséñela sobre cómo llevar la ropa puesta.

El grupo estalló en carcajadas una vez más, justo cuando Umbridge pasaba. Ella envió a los adolescentes risueños una mirada sucia. Ruth escuchó a Fred murmurar algo grosero en voz baja.

—¡Fred!—Ruth lo regañó en broma.
—¡Eso es rudo!

—¡Pero ella lo es!—Fred exclamó de vuelta.

—Ella es horrible—dijo Casper por primera vez. —Ella me dio trabajo extra por dejar caer mi pluma en clase.

Harry, Hermione, Ron y Ginny Weasley se acercaron al grupo y se sentaron.
—¿De qué estamos hablando?—Preguntó Harry.

Harry se encogió de hombros.
—Bien. Solo escribí líneas

Mientras se servía el almuerzo, el grupo se dividió en conversaciones más pequeñas. Casper habló con Hermione, lo que le dio a Ruth la oportunidad de hablar con Fred.

—¿Qué quería Sprout?— Fred le preguntó, mordiendo su sándwich de pavo.

Ruth notó que Katrina y George la miraban a ella y a Fred por el rabillo del ojo.

—Ella solo me dijo que tengo que trabajar más duro si quiero aprobar mi EXTASIS de Herbología—dijo Ruth, sabiendo que Fred no le contó a nadie sobre su lecciones de tutor y probablemente quería mantenerlos en secreto.

—Puedo ayudarte si quieres—ofreció Fred con una pequeña sonrisa.
—En realidad esta vez.

Ruth imitó la sonrisa de Fred.
—Ok. Eso sería genial.